El no de los socios del Gobierno a la reforma laboral comienza a tener sus primeras consecuencias. Hoy en Euskadi estaba convocada la Mesa de Diálogo social, sin embargo, no se celebrará. El sindicato CCOO ha optado por no acudir tras el rechazo del PNV a la reforma laboral que se votó el pasado jueves en el Congreso. "Nuestra gente no entendería que tras el no del jueves hoy martes nos sentáramos como si no hubiese pasado nada", ha asegurado esta mañana Loli García, secretaria general de la central en el País Vasco.

La mesa que reúne a Gobierno, patronal y sindicatos ya contaba con la ausencia de las dos principales centrales en Euskadi, ELA y LAB, que no participan de ella, pero ahora se suma la de CCOO. Precisamente CCOO, junto a UGT, ha sido una de las valedoras de la reforma que la semana pasada salió adelante gracias a un error de votación de un diputado del PP. García asegura que su central no da por roto nada pero sí ve la necesidad de "abrir un proceso de reflexión" tras lo sucedido.

Ha defendido que la posición del PNV no se entiende y critica que se escudara en la no inclusión de la prevalencia de los contratos autonómicos en la ley cuando ya existe un acuerdo entre centrales, patronal y Gobierno de 2017. Acuerdo cuya vigencia no ha variado tras la aprobación de la nueva norma. García, en declaraciones a Radio Euskadi, ha señalado que la decisión de aplazar la Mesa de Diálogo Social convocada para hoy no supone "romper nada" ni avanzar una ausencia permanente de la misma, como promueven ELA y LAB. Subraya que ahora se debe dejar "reposar lo sucedido" .

Recuerda que se debe dotar de valor y "certidumbre" a esa Mesa y a lo que en ella se acuerde pese a que no participen ELA y LAB. Las dos centrales nacionalistas cuentan con la mayoría sindical vasca, el 41% y 19% respectivamente, frente al 28 que suman CCOO y UGT: "No están porque no quieren estar, porque niegan ese ámbito".

En su opinión la actitud de los socios de Gobierno que rechazaron la reforma su "una irresponsabilidad". Apunta que si no llega a ser por el error de un diputado del PP, "hoy estaríamos en un escenario muy complicado y de difícil recuperación": "No se ha hablado del contenido de la reforma, de los derechos que se recogen en los 52 páginas del acuerdo. Esta no es una ley de punto final".