El Consejo de Ministros ha aprobado este martes una rebaja del 20% del IRPF a los agricultores y ganaderos, así como otras ayudas económicas y líneas de crédito, para apoyar al sector ante la sequía que perjudica a sus producciones. Así, el rendimiento neto para las actividades agrícolas y ganaderas que tributan en el IRPF por módulos tendrán una reducción del 20%.

El Gobierno estima que la medida beneficiará a 918.000 agricultores y ganaderos, y reducirá la base imponible en más de 500 millones de euros. Del lado fiscal, igualmente se ha aprobado la exención de las cuotas del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de naturaleza rústica para productores agrarios que reúnan ciertos requisitos.

También se ha decidido flexibilizar el acceso al subsidio agrario, con la reducción del número de peonadas -número mínimo de jornadas reales cotizadas- que permiten obtenerlo en Extremadura y Andalucía de 35 a 20, una medida que favorece a los trabajadores eventuales agrarios. Con el mismo fin, se equipara la contratación como fijo discontinuo y la contratación eventual.

Según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) en la Península las precipitaciones acumuladas desde el pasado 1 de octubre hasta el 1 de marzo de 2022 fueron un 40% inferiores a los valores normales para el periodo de referencia 1981-2010. En el sur de España, ha alcanzado el 60%.

Las reservas de las cuencas hidrográficas del Guadalquivir y del Guadiana apenas alcanzan el 30%.

Las regiones más afectadas por la sequía son Andalucía, el sur de Extremadura y Castilla-La Mancha, así como varias comarcas de Murcia, Lérida y Gerona, según la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores (COAG). Por sectores, los más afectados son el cereal, el olivar, el viñedo y los almendros de secano, así como los pastos para la ganadería extensiva y la apicultura.

Asimismo, se ha decidido aplazar el pago de las cuotas a la Seguridad Social para las empresas incluidas en el Sistema Especial Agrario y para autónomos pertenecientes al Sistema Especial para Trabajadores por cuenta propia (SETA), que ya están a un interés muy reducido, del 0,5%, siete veces inferior al habitual.

A la vez, se pondrá a disposición de los operadores agrarios una línea de ayuda, en régimen de concesión directa, para la bonificación del principal de operaciones de financiación formalizadas a través de las entidades financieras, para lo que se habilita un presupuesto de 10 millones de euros, que podrá movilizar más de 100 millones de euros en el sector.

Las medidas aprobadas, que competen a seis ministerios distintos, tienen como objetivo contribuir al mantenimiento de la rentabilidad y la sostenibilidad de las explotaciones agrícolas y ganaderas, en un contexto de dificultades acumuladas por la subida de los precios de insumos, materias primas y energía.