Casi dos meses después de que Yolanda Díaz anunciara su intención de limitar los precios de determinados alimentos en los supermercados... silencio. La idea de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo desencadenó un enorme terremoto de reacciones, tanto político como en el sector, pero su plan no ha avanzado pese a que los precios siguen creciendo con fuerza.

Tanto el Ministerio de Trabajo, al frente de la iniciativa, como las asociaciones de empresarios del sector confirman que no se han vuelto a reunir más allá de en aquella sonada ocasión. Entonces, el 12 de septiembre, quedaron en volver a encontrarse, pero no ha sucedido ni hay una fecha para ello, como corroboran desde ambas partes.

Desde el departamento de Díaz aseguran que se han producido "contactos" al respecto, idea que no respaldan las patronales de distribución, donde dan por muerta la "ocurrencia" de las cestas de productos básicos con precios limitados. Por su lado, en el Ministerio de Consumo se desmarcan del proyecto, remitiendo al de Trabajo al ser consultados por la iniciativa, al considerar que es la cartera que la está liderando.

De un gran acuerdo con las distribuidoras a la cesta de Carrefour

Yolanda Díaz anunció el pasado 6 de septiembre en una entrevista con el periódico elDiario.es su intención de establecer precios máximos para determinados alimentos en los supermercados. "Quiero un acuerdo con las distribuidoras para topar los precios de alimentos básicos como el pan, la leche o los huevos", aseguró. "Un acuerdo que consista en determinar una cesta de productos básicos, en torno a 20 o 30 productos, en los que, como hemos hecho con el gas y otras materias, topemos los precios. 20 o 30 productos que son básicos: la leche, el pan, los huevos, la fruta…".

El plan se apoyaría en la idea de que las empresas están aumentando los precios por encima de lo que están encareciéndose sus costes, como vienen manteniendo también UGT y CCOO. "Alguien aquí se está enriqueciendo por el camino y está utilizando la guerra. Esto está pasando y hace imposible la vida de la gente", mantuvo.

Después, mantuvo una reunión con representantes del sector. A ella asistieron responsables del Consejo de Consumidores y Usuarios y de la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED), de la Asociación de Cadenas Españolas de Supermercados (ACES) y de la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (ASEDAS).

Todas ellas han sido consultadas para la elaboración de este artículo, y todas confirman que no hay ninguna novedad sobre estos "topes" de precios para que los españoles puedan hacer frente a la inflación. También se produjo un encuentro aparte con responsables de Carrefour, a iniciativa de estos.

La francesa fue la única gran superficie que lanzó una promoción en la línea de lo que pedía Díaz, aunque sin acordarlo con sus competidores. Carrefour lanzó una cesta de 30 productos básicos por 30 euros que estará disponible hasta el 8 de enero en sus supermercados, para hacer frente a la inflación, y que incluye artículos de alimentación, droguería e higiene, aunque sin carne, fruta ni pescado.

La CNMC recordó que fijar precios está prohibido

Pero nada más. Actualmente, no hay reuniones a la vista y los distribuidores no esperan que se produzca ningún avance. El presidente de la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc), Ignacio González, que representa a fabricantes y empresas de productos de gran consumo, aseguró la semana pasada en un congreso que la propuesta de Yolanda Díaz tiene "cero recorrido", aseverando que desde primera reunión en principios septiembre no se ha producido ningún nuevo movimiento por parte de los ministros.

Sobre la idea de "enriquecerse", mantuvo que el sector de gran consumo sólo está subiendo los precios "cuando no hay más remedio" tras establecer planes de ahorro y bajar sus márgenes. Según él, las empresas han tardado en repercutir la subida de costes en el precio de venta al público.

Que la ministra plantee un cártel es durísimo"

antonio garamendi, presidente de ceoe

La idea tampoco hizo gracia a la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). Su presidente, Antonio Garamendi, volvió a reprochar hace unas semanas la cesta de la compra de Díaz con precios "congelados". "Que un miembro del Gobierno haga un planteamiento sobre los precios de un sector es gravísimo. A esto todo el mundo le llama cártel, que la ministra plantee un cartel es durísimo", remarcó.

En el mismo sentido se manifestó el organismo encargado de preservar la competencia, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que advirtió de que cualquier acuerdo entre operadores para fijar precios máximos en algunos alimentos está prohibido por ley y recordó que así lo regulan tanto la Ley de defensa de la competencia como el Tratado de funcionamiento de la Unión Europea. "La fijación entre operadores de precios máximos, incluso bajo el auspicio o el impulso de autoridades públicas, es un acuerdo de precios de los prohibidos" por esas normativas, señaló entonces.

Y el Ministerio de Consumo no parece tener intención de impulsar o respaldar de alguna manera la propuesta de la ministra de Podemos. El departamento de Garzón elaboró una lista de los alimentos que deberían incluirse en esa cesta para que sea de calidad, saludable y sostenible, que incluía hortalizas y frutas -al contrario que la de Carrefour-, cereales, legumbres y pescado. Nada más.

Preguntados por el estado en el que se encuentra la medida, que también respaldaron con la presencia del ministro Alberto Garzón en las reuniones con los representantes de las asociaciones, se limitan a redirigir a Trabajo. El plan primigenio incluía volver a convocar otro encuentro después de las reuniones que Díaz tenía previsto mantener en el marco de la cumbre del G20 en Bali, Indonesia. Pero este viaje tuvo lugar a mediados de septiembre, hace ya mes y medio.