La junta general ordinaria de accionistas de 2024 de CaixaBank ha dado luz verde, con la aprobación de los ocho puntos del día, a la distribución de un dividendo de 0,3919 euros brutos por acción correspondiente al ejercicio 2023. El evento ha tenido lugar este viernes en el Palau de Congresos de Valencia, con la presencia o representación de 28.461 titulares de acciones que suman el 77,81% del capital social.

También se ha aprobado la reelección de la consejera María Verónica Fisas como independiente y la reducción del capital social para amortizar la totalidad de las acciones propias adquiridas en el marco del programa de recompra de acciones.

El dividendo aprobado supone un incremento del 70% frente al repartido en 2023, representa un 'payout' del 60% y el pago se hará efectivo a los accionistas a partir del próximo 3 de abril. Así, la cuantía total destinada a dividendos, con cargo a los resultados de 2023, asciende a 2.890 millones de euros.

Los accionistas han dado el visto bueno a las cuentas anuales individuales y consolidadas, y a sus respectivos informes de gestión, correspondientes a 2023; así como a la gestión del consejo de administración durante el ejercicio.

También han aprobado otros acuerdos, como reelección del auditor de cuentas para 2025, la modificación de la política de remuneraciones de los consejeros o la autorización y delegación de facultades para la interpretación, enmienda, complemento, ejecución y desarrollo de los acuerdos aprobados.

El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, ha asegurado que la entidad es "más sólida, más rentable y con una mayor capacidad para financiar a empresas y familias" gracias a la aplicación de su Plan Estratégico 2022-2024. Goirigolzarri ha celebrado que a pesar de tener unos objetivos iniciales "muy ambiciosos", el banco está en el camino de superarlos.

Por ello, ha dicho que su previsión es mejorar el objetivo de rentabilidad que incluía el Plan para 2024 e incrementar la retribución al accionista.

CaixaBank ha elevado el objetivo de devolución de capital en el periodo 2022-2024 de los 9.000 millones previstos a los 12.000 millones, y ha recordado la propuesta que se debe aprobar en la Junta de repartir un dividendo bruto por acción de 0,3919 euros y el programa de recompra de acciones por 500 millones iniciado la semana pasada.

Por su parte, el consejero delegado de la entidad, Gonzalo Gortázar, ha señalado que el banco ha hecho frente a un entorno "muy exigente" y ha explicado que los resultados de 2023 se deben a la finalización con éxito de la integración de Bankia y a la normalización de los tipos de interés.

Ha dicho que estos dos puntos "han permitido hacer funcionar a pleno rendimiento todas las líneas de negocio", así como ofrecer una rentabilidad a los accionistas a niveles, textualmente, muy razonables.

"El hito se produce tras un largo periodo de retornos bajos y nos ha permitido tener una solvencia muy fuerte y aumentar muy significativamente el dividendo", ha añadido.

Sobre la demanda de crédito en el conjunto de la economía española, ha explicado que la nueva producción en el último trimestre del año pasado permite prever que no está "muy lejos de tocar fondo", aunque ha añadido que ese momento todavía no ha llegado.