Ibercaja Banco ha presentado este sábado su nuevo plan estratégico 2024-2026 en el que se marcan como objetivos ganar base de clientes comprometidos y mantener cubierto el coste de capital. Sin embargo, la entidad aragonesa no contempla en esta nueva línea estratégica su salida a bolsa. Ibercaja tenía obligación legal de salir al mercado bursátil por la Ley de Cajas de 2013 o dotar un fondo de reservas a través de su fundación. El banco ha optado por lo segundo y en el mes de marzo ya tenía los 320 millones de euros en este fondo de reserva, por lo que se ha quitado la obligatoriedad de salir a bolsa. 

“Hace un año y medio se optó por constituir el fondo de reservas”, ha explicado el presidente de Ibercaja, Francisco Serrano, quien ha destacado que los 320 millones de euros de ese fondo han llegado mucho antes del plazo legal que era diciembre de 2025. Sin embargo, Serrano sí ha matizado que la salida a bolsa ya no es una obligación “sino que lo vemos como una oportunidad”. 

Serrano ha incidido en que no pueden descartar la salida a bolsa “porque siempre puede haber una oportunidad, cuando la Fundación Bancaria Ibercaja lo vea así”. No obstante, ha insistido en que “a fecha de hoy no está prevista”. Ibercaja estuvo a punto de salir a bolsa en 2022, pero la guerra en Ucrania y la inestabilidad de los mercados frustró la decisión del banco. 

El presidente de la entidad también se ha referido a la inestabilidad política. Serrano ha lamentado la situación política de los últimos años y ha explicado que en democracia se han celebrado 16 procesos de elecciones generales y ocho de ellos se han hecho en los últimos ocho años, es decir, “el 50% de los procesos electorales se han producido en los últimos años, hay inestabilidad, fragmentación y polarización” y ha añadido que “no es un buen caldo de cultivo para invertir”. 

Ante esta situación, el presidente de la entidad ha explicado que se tendría que optar por una centralidad “como espacio de convivencia, no que todo el mundo sea del centro”, porque “eso sí que genera estabilidad”. 

Plan estratégico 2024-2026

Estas declaraciones las ha hecho el presidente en la presentación del nuevo plan estratégico hasta 2026 al que han definido como ambicioso, pero que confían en cumplir. Así, Víctor Iglesias, consejero delegado de Ibercaja, ha explicado que estiman que su beneficio en 2026 será de unos 300 millones de euros, como fue el cierre de 2023, que se situó en 304 millones de euros, una cifra récord en la historia de la entidad. Los directivos del banco han explicado que esa cifra se conseguirá con menor rentabilidad, por lo que es bueno. 

De hecho, en 2023, la entidad cerró con un ROTE (rentabilidad) del 11,6%, pero para el final del plan estratégico lo sitúan en el 10%. Iglesias ha explicado que es “más meritorio” decir que Ibercaja va a conseguir un ROTE del 10% en 2026, que haber conseguido el 11,6% en 2023. “El año pasado fue excepcional por la subida de tipos desde mediados de 2022”, ha señalado el consejero delegado y ha añadido que a partir de ahora esos tipos van a comenzar a bajar. De hecho, estiman que a final de año los tipos se situarán en el 3%, frente al 4,5% actual.

Víctor Iglesias ha asegurado que los buenos resultados de 2023 se podrán repetir en este 2024, pero no será así en 2025 ni en 2026 por el contexto económico. Pero ha incidido en que será así para todo el sector, por lo que ha explicado que el objetivo ahora es conseguir que el margen de clientes baje lo menos posible.

Al cierre del trienio, Ibercaja habrá reforzado su solvencia, situando el coeficiente CET1 fully loaded entre el 13,5% y el 14% (desde el 12,7% actual), preservará un índice LCR de liquidez por encima del 190%, mantendrá la tasa de activos improductivos (NPA´s) por debajo del 3,5%.

Por lo que respecta a los clientes, Ibercaja cuenta con 2,5-3 millones de clientes y el objetivo es registrar un incremento acumulado de la base de clientes denominados como “comprometidos” del 10% entre 2024 y 2026. Así serían unos 50.000 nuevos clientes particulares, 6.000 clientes de negocios y 2.000 clientes procedentes de pymes y grandes empresas.

El Plan Estratégico, que está basado en 13 iniciativas, está dotado con un presupuesto específico de 45 millones de euros para este ejercicio que, sumados a los recursos previstos en el presupuesto ordinario, totalizan 110 millones de euros de inversión para este año en Ibercaja, de los cuales más de la mitad irán destinados a la transformación tecnológica, operativa y comercial. 

El crecimiento de la entidad seguirá pivotando sobre las áreas geográficas de expansión consolidada, Madrid y Arco Mediterráneo, al mismo tiempo que potenciará el liderazgo comercial con el que ya cuenta en Aragón, La Rioja, Guadalajara, Burgos y Badajoz, además de propiciar un rejuvenecimiento de la base de clientes.