La Federación Nacional de Asociaciones de Transporte por Carretera (FENADISMER) pide ayuda. Apoyo por parte del Gobierno, para tratar de paliar los problemas a los que se enfrenta el colectivo día a día, y que vienen arrastrando desde hace tiempo.

En su revista corporativa, la federación demanda un Plan de apoyo para autónomos, microempresas y pequeñas empresas de la economía social para fomentar tanto su desarrollo económico como las condiciones de contratación de clientes, que ahora resultan abusivas para FENADISMER. También piden un aumento de las sanciones a las compañías morosas o con conductas que implantan la contratación por debajo de coste.

Mantener fiscalidad para el transporte en carretera

Otro tema a mejorar por parte del Ejecutivo será el mantener la fiscalidad en los niveles actuales para todas las empresas del transporte por carretera. Además, piden ayuda por los problemas que generan las subidas de impuestos de los carburantes o establecimientos de peajes.

De igual modo, desde la Federación, exigen un Plan de Lucha contra la competencia desleal, especialmente ejecutada por empresas deslocalizadas (casi un tercio del total) y que dificultan el trabajo de los que mantienen sus flotas (y sus impuestos) en sus países de origen, en este caso en España. Su último requerimiento para por mejorar el acceso a las nuevas teconologías aplicas a su sector.

Las cifras de un sector a la baja

Estas peticiones para los autónomos, microempresas y pymes de este tipo de transporte cobran más sentido cuando se ven las cifras. En enero de 2014, estas empresas contaban con una flota de 65.000 vehículos, un 24% más que en enero de este año (49.000).

Entretanto las grandes compañías ha crecido en un 25%, pasando desde 144.000 hasta 179.000 vehículos. Estas últimas, además, disfrutando de una serie de ventajas, incluso con los concesionarios, a las que las pymes no pueden acceder. Son las grandes empresas, también, las que han matriculado sus flotas fuera del país (generalmente en países del Este) contratando a trabajadores extranjeros por menos dinero pero operando en donde lo hacían antes.