Para notificar su baja ante la Agencia Tributaria, el profesional deberá cumplimentar el modelo 036 o el 037 para el que tendrá el plazo de un mes, tal y como recuerdan desde la guía elaborada por la Ionos. Este formulario podrá presentarse de forma física o vía telemática.

Dentro del mismo debe prestar especial atención a las casillas 150 (en la que se marca el cese de la actividad), 151 (en la que se indica la causa de fin) y la 152 (la fecha que marca el fin de la actividad).

A pesar de haber cumplimentado el modelo correspondiente el autónomo aún tendrá que realizar, cuando le correspondiese, sus declaraciones tributarias y resúmenes anuales.

Baja también en Seguridad Social

Por otro lado, y para hacer la notificación a la Seguridad Social, será preciso cumplimentar el modelo TA.0521 que supone la baja del Régimen General de Trabajadores Autónomos (RETA). Conviene rellenar bien todos los campos para que así la baja cuente desde el propio día de cese de actividad y no finalice con el mes natural. De esta forma pagará menos cuota de autónomos.

Además, en caso de que el autónomo tuviese trabajadores a su cargo también tendrá que hacer los trámites necesarios con la Tesorería General de la Seguridad Social para solucionar la situación de estos.

También existe la opción de solicitar una baja temporal

Si el autónomo cree que va a volver a ejercer su actividad en poco tiempo no es necesario que haga el cese definitivo de actividad, se puede solicitar una baja temporal. Esta se puede realizar hasta tres veces al año y no conlleva el pago de cuota durante la misma. Es decir, solo se abonará mientras se esté realizando la actividad (la fecha la marca el cese), tal y como recuerdan desde la Guía.

Además algunos autónomos, una vez deciden finalizar definitivamente con su trabajo o negocio, pueden cobrar la prestación por cese de actividad. Esta, conocida como "paro de los autónomos", no siempre se podrá percibir, por lo que conviene informarse. El primer requisito para poder recibir la cuantía correspondiente será haber cotizado por el cese, cosa que no todos los profesionales hacen.