El presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha anunciado este martes el cierre total de la hostelería y restauración, salvo para reparto a domicilio, los lugares para actividad deportiva no oficial y los centros comerciales.
No obstante, permanecerá abierto el comercio minorista en todos los casos con medidas de higiene y seguridad. Todas estas medidas entrarán en vigor desde el próximo sábado, día 7 de noviembre.
Mañueco ha lanzado un llamamiento a la responsabilidad individual porque, a pesar de que Castilla y León ha realizado diferentes confinamientos a lo largo de todo el verano, no se ha conseguido frenar la expansión de la enfermedad en la región y "los datos son alarmantes".
De las nueve capitales de provincia, cuatro rondan una tasa de 1.000 contagios, y la consejera de Sanidad, Verónica Casado, aseguraba hace unos días que «el confinamiento domiciliario es inevitable», a la vista de los datos de contagios.
«Ese confinamiento va a existir porque es necesario que frenemos el virus, aunque se permita el trabajo, la educación y otros aspectos que no tuvimos en marzo, pero habrá que limitar las actividades no imprescindibles y estar en casa, lo vamos a tener que hacer», explicó Casado.
Te puede interesar
-
Condenan a familia marroquí por explotación laboral en Valladolid
-
Muere un camionero de 54 años al volcar su vehículo y ser arrollado por un tren en Salamanca
-
Gallardo, el candidato más débil del PSOE ante el terremoto electoral promovido por Génova
-
Castilla y León declara el nivel 2 de gravedad para el incendio de Peñalba tras entrar en Segovia
Lo más visto