El ex tesorero del PP Luis Bárcenas no cumplirá condena en la misma cárcel que su esposa, Rosalía Iglesias. Al menos de momento. Él seguirá en el centro penitenciario de Soto del Real y ella en Alcalá Meco, donde ingresó el pasado 8 de noviembre tras hacer firme el Tribunal Supremo la pena por los primeros años de actividad de la trama Gürtel (1999-2005).

A mediados del pasado mes de octubre se conoció que Bárcenas había iniciado los trámites para solicitar su traslado a Alcalá Meco en la falsa creencia de que podría coincidir con su mujer cuando ésta ingresara, dado que son dos cárceles diferentes: una de hombres (Madrid II) y otra de mujeres (Madrid I). Ambos seguirán a 67 kilómetros de distancia.

Según han confirmado a El Independiente fuentes penitenciarias, la junta de tratamiento de Soto del Real propuso este miércoles otorgar a Bárcenas el segundo grado -el que disfruta la mayoría de los internos- y que su destino siga siendo esta prisión madrileña, donde permanece desde que en mayo de 2018 fue condenado por la Audiencia Nacional. La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias tiene que ratificar ahora esa propuesta.

De esta forma, el matrimonio ha reconsiderado la idea inicial y ha optado por que Rosalía Iglesias continúe en Alcalá Meco, considerada la mejor cárcel de las siete que hay en la Comunidad de Madrid. Debido a la evolución del coronavirus, Instituciones Penitenciarias cerró el mes pasado el módulo de mujeres de Soto del Real y trasladas a las 21 internas que había entonces a otros centros, concretamente a Alcalá de Henares, Estremera (ambas en Madrid) y Brieva (Ávila).

Sí podrían haber coincidido en Aranjuez y Estremera, prisiones que tienen tanto módulos de hombres como de mujeres. La decisión no es irreversible y en un futuro tanto Bárcenas como su esposa podrían pedir traslado de centro, lo que se revisa normalmente a la vez que la clasificación de grado. Este trámite se realiza cada seis meses como plazo máximo.

Iglesias, 12 años y 11 meses

El ex tesorero del PP ingresó en Soto del Real en mayo de 2018 para cumplir los 33 años que le impuso la Sección Segunda de lo Penal de la Audiencia Nacional en el caso Gürtel y que el Supremo rebajó en cuatro años cuando resolvió su recurso el pasado mes de octubre. Durante la fase de instrucción permaneció como preventivo durante 19 meses en el mismo centro penitenciario.

Su esposa tan sólo estuvo unas horas en la cárcel en 2018 tras ser condenada por la Audiencia Nacional a una pena de 15 años. La Sala concluyó que Rosalía Iglesias, en connivencia con Bárcenas, desarrolló durante años una actividad dirigida a enriquecerse de forma ilícita y a ocultar sus propias rentas y las de su esposo.

Iglesias pudo entonces eludir la prisión al depositar una fianza de 200.000 euros. No ahora, después de que el Tribunal haya ratificado parcialmente la sentencia de la Audiencia Nacional y le haya condenado a 12 años y 11 meses de prisión, casi tres años menos.