La sorprendente noticia de la supresión del Premio Nacional de Tauromaquia este viernes de inicio de mayo -mes eminentemente taurino y a apenas una semana larga de las elecciones en Cataluña- ha suscitado numerosas reacciones entre aficionados y opositores a las corridas de toros. Más allá del debate, el portavoz de Sumar en el Congreso, Íñigo Errejón, ha apretado al presidente del Gobierno -Gobierno del que forma parte su formación- para que se decante: o está con su ministro de Cultura, Ernest Urtasun, patrocinador de la medida, o está con su compañero y presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, o está con Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la Comunidad de Madrid que se ha postulado para acoger los premios impulsados por la Fundación Toro de Lidia.

Errejón ha criticado que la supresión del Premio Nacional de Tauromaquía haya generado una "coalición de intereses conservadores" liderada por Ayuso y Page que interpela al propio Jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez.

"Me parece que esto interpela tanto a Sánchez como a Illa (líder del PSC), ahora que estamos aquí en campaña catalana. Tienen que decir con quién están: si están con Page, con Ayuso o están con el Ministro de Cultura (Ernest Urtasun) y con la inmensa mayoría de la sociedad española", ha lanzado en declaraciones a la Cadena Ser, recogidas por Europa Press.

"No es normal que la sociedad española siga subvencionando algo que la inmensa mayoría de la sociedad española ya no quiere", asegura Errejón

El portavoz parlamentario de Sumar ha defendido que el Ministerio de Cultura simplemente ha "normalizado" lo que ya era un consenso "en la calle", al destacar que la "inmensa mayoría de los españoles está en contra del maltrato animal" y rechaza que la tauromaquia se le considere un "divertimento".

"No es normal que la sociedad española siga subvencionando algo que la inmensa mayoría de la sociedad española ya no quiere. Así que en esto se trata simplemente de ponerse en hora con la evolución ética de la sociedad española, y esto no debería levantar ampollas. No debería utilizarse como un arma de confrontación política", ha argumentado.

No obstante, ha lamentado cómo rápidamente tanto Ayuso como Page hayan salido a decir que van a reponer premios a la tauromaquia en sus respectivas autonomías, en una especie de "coalición de intereses conservadores".

"Me hubiera gustado ver esa rapidez pues para preocuparse por el estado de la Atención Primaria o el transporte público, pero no. Resulta que su problema es hacerle oposición al Ministerio de Cultura, reponiendo unos premios para algo a lo que la sociedad española hace mucho tiempo que le ha dado la espalda", ha criticado.

El Premio Nacional de Tauromaquia se creó en 2011 con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y se entregó por primera vez en 2013 a Paco Ojeda. El último galardonado, en 2023, fue Julián López, El Juli.