Alejandro Fernández y otros dirigentes del PP catalán, como el alcalde de Badalona, Xavier García Albiol, han introducido de forma reiterada en sus mítines mensajes en torno a la inmigración, la okupación y la delincuencia como tres de los asuntos que "más preocupan" a los ciudadanos de esta Comunidad, explican fuentes populares. Lo llamativo es que hayan sido Alberto Núñez Feijóo y Cuca Gamarra los que han cogido este guante en los últimos días, vinculando los tres fenómenos en un discurso considerado muy próximo al de Vox.

Pero lo cierto es que Génova testó los tres asuntos en 'focus group', según ha podido saber El Independiente. No es la primera vez que el PP recurre a este instrumento demoscópico más cualitativo que cuantitativo. Se trata de un grupos de personas, ajenas al partido, a las que se pregunta su parecer por cuestiones muy concretas e inician un diálogo al respecto, lo que permite evaluar el estado de opinión pública. En su momento, Génova evaluó hasta la barba del anterior presidente popular, Pablo Casado, para evaluar si le daba más madurez y credibilidad como líder de la oposición y futuro presidenciable.

Dirigentes del PP catalán ya alertaron a Génova desde hace tiempo respecto a que los ejes de la campaña catalana no debían girar tanto, o no sólo, en torno a la amnistía como a los asuntos de carácter más social y pegados al terreno que afectan a la vida cotidiana de los votantes, sin dejar de incluir en ese menú los ataques al independentismo y a un candidato socialista, Salvador Illa, al que consideran entregado a la estrategia de Pedro Sánchez.

El 43 de las okupaciones se producen en Cataluña

El alcalde de Badalona salió ayer en defensa de Feijóo tras las acusaciones de haber comprado los ejes del discurso de Santiago Abascal. Albiol escribió en su cuenta de X que "estoy viendo a mucho fariseo indignándose por las referencias de @NunezFeijoo a los problemas de inseguridad y okupación ilegal en Cataluña. Alguno de los que critican me puede explicar qué razón tiene que el 43% de las okupaciones ilegales en España se produzcan en Cataluña y especialmente en el área metropolitana de Barcelona? Alguien me puede discutir, desde la razón y no desde el estómago, que la mayoría de okupaciones ilegales generan problemas de inseguridad, delincuencia e incivismo? Hipocresía buenista", concluía.

Precisamente, el pasado sábado, durante un mitin en Badalona y en presencia del líder del PP, Albiol se refirió a los tres asuntos que tanta polvareda han levantado. El salto cualitativo se produce cuando es Feijóo el que asume esa línea argumental. "Le pido el voto a aquellos que están a favor de la inmigración legal, pero los que no admiten que la inmigración ilegal se deje en nuestras casas ocupando nuestros domicilios y nosotros no poder entrar en nuestras propiedades (...) Pido el voto a todos aquellos que se dan cuenta de que Cataluña tiene los índices de criminalidad, de robos y de hurtos y de reincidencia de los más altos de España", dijo el pasado martes.

El riesgo de un nuevo sorpasso de Vox al PP

Las mismas fuentes consultadas niegan que este cambio de estrategia responda al temor de que Vox vuelva a hacerles el sorpasso como hace tres años y medio para situarse en el cuarto puesto de las preferencias electorales, por detrás del PSC, Junts y ERC. Si en las vascas, el objetivo, fallido, de los populares era expulsarles del Parlamento autonómico, ahora pasa por ser la fuerza de referencia del centro-derecha, una vez desaparecido Ciudadanos del mapa político y con el partido de ultraderecha supuestamente a la baja. Feijóo ha admitido que esa es la meta ansiada.

Esas esperanzas, siempre dentro de la prudencia, son producto de los trackings diarios que salen del cuarto de máquinas de Génova. El tracking electoral del pasado martes coloca al PP con entre 11 y 12 diputados y a Vox entre 8 y 9. Esto es, una ligera ventaja que no termina de sentenciar a los de Abascal, aunque daría un balón de oxígeno a los populares y les permitiría concurrir con algo más de optimismo a las elecciones europeas del 9-J. "No hemos visto ni un solo tracking que nos coloque por debajo de los 11 escaños ni que diga que Ignacio Garriga va por delante de nosotros", aseguran distintas fuentes consultadas, aunque ese no parece ser el dato manejado por otras formaciones políticas.

Antecedente de las gallegas

En Génova comparan las dudas creadas en esta recta final de campaña electoral, que culmina hoy, con lo acontecido en las elecciones gallegas, cuando comenzó a crearse un estado de opinión en torno a la más que segura pérdida de la mayoría absoluta del PP. El último CIS de esas autonómicas les colocó entre 34 y 38 escaños, esto es, en la cuerda floja de la absoluta (38) y, finalmente, Alfonso Rueda firmó 40 escaños. En cambio, el sondeo flash del pasado lunes sobre las catalanas fue mucho más benevolente para el PP. Sin hacer proyección de escaños, dio a Alejandro Fernández entre el 9,6 y el 11,9 por ciento de intención de voto, muy por encima de Ignacio Garriga con entre el 5,8 y el 7,5 por ciento de las papeletas.