El relevo en la cúpula del Partido Regionalista de Cantabria (PRC) ya tiene nombre y fecha. Paula Fernández, actual vicesecretaria de Organización del partido y diputada autonómica, ha sido elegida este domingo por la militancia como candidata a la Presidencia de Cantabria en las elecciones autonómicas de 2027. Fernández tomará así el testigo de Miguel Ángel Revilla, figura central del regionalismo cántabro durante más de cuatro décadas y hasta ahora único cabeza de lista del PRC en unos comicios autonómicos.

La suya es una elección histórica por varios motivos. No solo se trata del primer proceso de primarias abiertas celebrado por el PRC en toda su trayectoria, sino que, además, por primera vez una mujer encabezará la candidatura autonómica del partido. Fernández se ha impuesto con claridad a su único rival, el alcalde de Reocín, Pablo Diestro, al obtener el 65,33 % de los votos frente al 33,66 % de su oponente.

En total, participaron algo más de 2.300 afiliados –apenas el 29,43 % del censo– de los cerca de 7.700 militantes convocados a votar en una docena de mesas repartidas por nueve comarcas. Paula Fernández recibió 1.504 votos; Diestro, 775. También se contabilizaron 12 votos en blanco y 11 nulos, según ha informado el partido en un comunicado.

Hija de 'El Norteño'

La elección por parte de las bases ratifica el apoyo mayoritario que Fernández ya había recibido del Comité Ejecutivo del PRC hace un mes. Sin embargo, la falta de acuerdo entre ambas candidaturas llevó a que fuera la militancia quien decidiera finalmente quién lideraría la nueva etapa del partido tras la era Revilla.

El propio Revilla, tras depositar su voto en la sede del PRC en Santander, llamó a la unidad del partido en torno a la nueva candidatura y prometió su "respaldo absoluto" a quien resultara ganador. “De aquí tiene que salir un PRC más fuerte, con otro candidato", subrayó en un encuentro con periodistas.

Fernández, de 53 años, cuenta con una dilatada trayectoria política en el partido. Nacida en 1971 en Bárcena de Pie de Concha, es licenciada en Derecho y madre de dos hijos. Es, además, hija del torero cántabro conocido como El Norteño, una figura popular en la región durante las décadas de los 60 y 70. Si bien su carrera política comenzó en el ámbito local –fue concejala y miembro del comité del PRC en su municipio natal desde 1999–, su trayectoria se consolidó en el entorno del Gobierno autonómico y la estructura orgánica del partido.

Número 2 del gobierno y el partido

Su punto de entrada fue como secretaria de Rafael de la Sierra, histórico dirigente regionalista, presidente del Parlamento de Cantabria y uno de los principales colaboradores de Revilla. A su lado, Fernández se formó en los entresijos del partido y de la administración autonómica. Tras la retirada de De la Sierra por motivos de salud y su fallecimiento en 2019, Fernández asumió mayores responsabilidades, tanto en el Gobierno –donde dirigió la Consejería de Presidencia, un departamento transversal clave en la gestión regional– como en la organización interna del PRC, donde ocupa el cargo de número dos desde hace años.

Desde 2015, es diputada autonómica y una de las figuras más próximas a Revilla. Dentro del partido se la considera una dirigente meticulosa, con gran capacidad de trabajo y lealtad a los principios del regionalismo cántabro. Fuentes internas destacan su perfil dialogante, su conocimiento del aparato y su cercanía con las bases. "Está encima de las cosas y de las personas", resumen quienes trabajan con ella, subrayando su compromiso con la gestión pública y su carácter resolutivo.

El reto que asume no es menor. Tras décadas de liderazgo carismático de Revilla –y su figura omnipresente tanto en el Gobierno como en la política nacional–, Paula Fernández representa una transición generacional y también de estilo. De momento, ha logrado el primer paso: convencer a la militancia de que es ella quien debe pilotar el nuevo tiempo del PRC.