El gran esfuerzo inversor que la OTAN pide a sus socios por presiones de Donald Trump es el nuevo caballo de batalla entre el Gobierno y el PP tras la estudiada puesta en escena de Pedro Sánchez el pasado domingo desde Moncloa. Allí aseguró que España queda exonerada de llegar al 5 por ciento del PIB (3,5 en defensa pura más un 1,5 en ciberseguridad e infraestructuras) , afirmación desmentida por el primer partido de la oposición, convencido de que el jefe del Ejecutivo ha hecho una interpretación libérrima del contenido de la respuesta del secretario general de la Alianza, Mark Rutte.

En principio esta es una cuestión que enfrentaba a cara de perro al PSOE con sus socios de gobierno y del Parlamento. De hecho IU insistió ayer en su histórica petición de salir de la OTAN y Podemos calificó de "tomadura de pelo", por boca de su coportavoz Isa Serra, las explicaciones ofrecidas por Sánchez. Ahora es el PP el que cuestiona la veracidad de las palabras del presidente del Gobierno y rechaza la existencia de una "excepción ibérica" en materia de seguridad, tal y como Rutte ha puntualizado este misma tarde.

"Invertir en seguridad y defensa es una prioridad"

Sin embargo, el PP no quiere responder al interrogante de si son partidarios de llegar a ese 5 por ciento del PIB para gasto en Defensa y seguridad, cuestión a debatir en la cumbre de la OTAN que arranca hoy y dura hasta el miércoles. La ponencia política del 21 congreso popular de los días 4, 5 y 6 de julio alude a la cuestión OTAN para asegurar que "invertir en seguridad y defensa es una prioridad. Buscamos un retorno: proteger a nuestros ciudadanos, ayudar a nuestros aliados y defender nuestros valores. El vínculo transatlántico sigue siendo indispensable y debemos trabajar para preservarlo y fortalecerlo". En materia de defensa "dicho vínculo se plasma en la OTAN, una alianza militar defensiva".

Y es en este punto donde inciden en los dos asuntos que están sobre la mesa, esto es, el porcentaje del gasto y si cualquier compromiso al respecto debe pasar por el Parlamento. "Debemos cumplir con los compromisos de inversión asumidos en el seno de la OTAN y hacerlo, en todo caso, con el aval del Congreso de los Diputados", agrega la ponencia política, aunque sin entrar en el detalle de cuál debe ser esa inversión para la próxima década.

Todo ello lleva aparejado, dicen, "dignificar el papel de las Fuerzas Armadas. La defensa de nuestras fronteras y la soberanía nacional tiene nombres y apellidos: los de las mujeres y hombres que conforman nuestras Fuerzas Armadas". Por ello apuestan por la ampliación de los efectivos, la mejora de sus condiciones laborales, la renovación de material defensivo o la inversión en medios tecnológicos, por entender que "no son solamente el imprescindible reconocimiento a su trabajo, sino una manera de prestigiarlo fuera y dentro de nuestras fronteras".

"¿Qué queremos que pase invirtiendo más en seguridad? Nada. Queremos invertir en seguridad para asegurarnos de que no pase nada", agrega el texto sometido ahora a un periodo de enmiendas que culmina este miércoles.

Otra referencia a la OTAN se hace bajo el epígrafe de las relaciones con China -"un socio, un competidor y un rival sistémico". Creen los asesores del PP en materia internacional que "debemos estar atentos y actuar unidos, junto a nuestros socios de la UE, especialmente en cuestiones económico-comerciales. Tenemos que utilizar todos los instrumentos para evitar distorsiones provocadas por malas prácticas chinas. Debemos, asimismo, trabajar conjuntamente con nuestros aliados de la OTAN y países afines en el ámbito Indo-Pacífico en cuestiones políticas, económicas y de seguridad".

Sémper no quiso aclarar si apoyan destinar un 5 por ciento del PIB al gasto de Defensa y seguridad

No hay duda pues del compromiso de los populares con la Alianza Atlántica, pero su portavoz, Borja Sémper, no quiso aclarar ayer, tras la reunión del comité de dirección del partido, si apoyan destinar un 5 por ciento del PIB al gasto de Defensa y seguridad, poniendo la pelota en el tejado del Gobierno y en sus socios con el objetivo de que eclosionen sus enormes discrepancias internas. Por ello prefieren esperar a los términos concretos del acuerdo del miércoles.

Subraya Sémper que, por el momento, Sánchez ha comprometido un gasto adicional de 13.000 millones de euros a falta de saber cómo lo materializará y todo ello "sin Presupuestos, ni mayoría parlamentaria ni en el seno del propio gobierno. Quiere engañar a su socios y no lo va a conseguir. El debate está aquí. La posición del PP es la de cumplir los compromisos con nuestros socios. Vamos a ver qué sucede el miércoles".

Feijóo ha señalado además que esta semana alertará a sus socios europeos respecto a que el jefe del Ejecutivo no puede hablar en nombre del país desde el momento en que no ha tratado este asunto ni con el primer partido de la oposición ni con el resto de la Cámara, de modo que no le vincula a futuro si llega a ocupar la presidencia del Gobierno.  "Esta es una decisión del señor Sánchez no de España, que ni tiene Presupuestos ni habla en representación de los españoles", dijo ayer en Esradio.

Rutte salió a media tarde. Afirmó que "no hay excepciones" y España necesitará llegar al 3,5 por ciento del gasto en Defensa, pero Moncloa afirma que tras estas palabras realmente "lo que dice es que él cree que España no va a ser capaz de cumplir con los objetivos de capacidades militares defensivas con un gasto de 2,1 pro ciento y será necesario llegar al 3,5. Es su opinión, pero esto no cambia nada respecto al acuerdo anunciado pro el presidente del Gobierno",