Expresar la ruptura con España y reivindicar la independencia de 'Euskal Herria' se ha convertido en una constante desde hace décadas cada 6 de diciembre para la izquierda abertzale. Este año las juventudes de Sortu, la formación principal de EH Bildu, la coalición que lidera Arnaldo Otegi, han decidido ir un poco más allá y reivindicarlo durante toda una semana con ataques a elementos e instituciones que de una u otra manera simbolicen a España. El lunes, Ernai, la organización juvenil de Sortu, inició lo que ha calificado como “una semana de activación” contra todos los “símbolos” españoles y lo que considera que es un proceso creciente de “españolización” en las calles y barrios del País Vasco.
Partidos políticos, instituciones o comercios han sido hasta el momento el objetivo de sus ataques. Una de las últimas acciones la han perpetrado en Bilbao contra la franquicia ‘Maestros Turroneros’, dedicada a la venta de dulces y cuyo lema es “Sabor a España”. Varios miembros de Ernai atacaron el martes uno de los establecimientos con pintura y arrojaron panfletos con el lema “huele a España”.
A través de las redes difundieron la agresión al son de “España huele a culo” y justificando su acción asegurando que “la simbología española está cada vez más normalizada” y se ha convertido “en una amenaza”: “Basta ver las franquicias de nuestros barrios, el españolismo reaccionario se está extendiendo y puede suponer una amenaza para nuestra sociedad y barrios”. Añaden incluso que 'Euskal Herria' "no se puede entender sin valores progresistas" y que "los discursos racistas, machistas y xenófobos que difunde el españolismo" suponen una vulneración "de los derechos de nuestra sociedad".
El martes, activistas de Ernai atacaron la sede del Partido Popular en Bilbao con pintura roja y colocando un cartel en favor de una marcha por la independencia que la organización ha convocado día 20 en la capital vizcaína. La acción, grabada y difundida en redes, se ilustra con imágenes de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso a la que acusan de “querer acabar con nuestra nación y ridiculizar nuestra lengua”. Acusan al PP de ser enemigo del pueblo vasco y le advierten de que “nos tendrán enfrente”.
'Maquinaria de castellanización"
Ese mismo día, la bandera de España que ondeaba en la sede de la Seguridad Social en Vitoria fue arrancada. La acción fue denunciada por la delegada de Gobierno en Euskadi, Marisol Garmendia quien acuso a Ernai de la misma y recordó que no podemos volver a los "tiempos oscuros, violentos y antidemocráticos".
Otra de las acciones llevadas a cabo esta semana por las juventudes de la coalición que lidera Otegi la han protagonizado en el antiguo paso fronterizo de Dantxarinea. Tras pintar el lema ‘Gazteok Independentzia’ (Los jóvenes, independencia) y arrojar pintura roja, difundieron el ataque asegurando que “España y Francia dividen nuestro pueblo”.
Este miércoles, día internacional del Euskera, también promovieron una movilización en contra de la “maquinaria de castellanización” que perjudica la presencia del euskera en las calles de Euskadi. Entre las acciones llevadas a cabo destaca el ataque con pintadas y pintura a los juzgados de San Sebastián para denunciar el “ataque político y judicial”.
Pulso abertzale por los jóvenes
Este miércoles en el Campus de Alava de la Universidad Pública del País Vasco apareció una pancarta con la imagen de varios políticos cuyos rostros estaban rodeados por círculos a modo de diana. Entre ellos figuraban el líder del PSE, Eneko Andueza, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel díaz Ayuso, el líder de Vox, Santiago Abascal y Vito Quiles. Bajo ella aparecían varias bolas blancas a modo de elemento para arrojar a las 'dianas'.
De algún modo, las acciones comenzaron con antelación a esta semana "de activación". Con motivo de la visita del Rey Felipe VI a Gernika el pasado viernes 26 de noviembre, Ernai organizó actos en contra de su presencia. En los mismos además de oponerse a la monarquía y reclamar su expulsión de Euskadi, se defendió la independencia de 'Euskal Herria' con la quema de una bandera de España.
Las movilizaciones de las juventudes de la izquierda abertzale tradicional se han intensificado en los últimos meses. La irrupción de una corriente crítica en el seno de la izquierda abertzale, GKS, con su propios movimientos juveniles cada vez más numerosos en apoyo, ha abierto una suerte de carrera por controlar cada vez más colectivos. Los últimos incidentes ocurridos con la Ertzaintza, y de los que se acusa a sectores afines a GKS, llevó incluso a Arnaldo Otegi a desvincularse de los mismos.
El pulso se libra en todos los frentes con amplia presencia juvenil, desde el universitario hasta el deportivo, feminista, sindical o cultural. El músculo cada vez mayor mostrado por la corriente crítica ha comenzado a hacer mella en las bases más jóvenes de la izquierda abertzale tradicional que representa Ernai y representa Arnaldo Otegi.
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3 Comentarios
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hace 3 semanas
los socios/amigos/camaradas del sanchismo…
hace 3 semanas
Posiblemente busquen un plan de reconciliación como el de Catalunya.
Seguro que la izquierda sale en tromba contra esas cosas…
Hay no, que no son de la ultraderecha!!!!
Me parto!!!!
hace 3 semanas
Los cachorros de ETA. Nunca ha dejado de estar desactivado el movimiento independentista. El adoctrinamiento de los jóvenes les viene de cuna. El complejo de superioridad que destila el pensamiento independentista le viene de las fuentes nacionalistas que lo han ido alimentando a voluntad.
Al PNV siempre le ha interesado mantener la calle caliente mientras ellos agitaban el nogal para recoger sus nueces. El problema es que, como pasa con todo movimiento extremista, es de índole sectario, supremacista, racista y xenófobo. Se alimentan del ideario marxista leninista y maoísta. La extrema izquierda es totalitaria y antisistema, esto es, antidemocrática, busca imponer el pensamiento único y el adoctrinamiento de las masas para, desde sus estructuras de poder, gobernar ese país (ficticio e idealizado) denominado Euskal Herria (Zaspiak Bat, Las siete son una), donde se engloba ese «nación vasca», de las provincias vascas del Sur (Egoalde), las del Norte (Iparralde) y Navarra (Nafarroa).
En el mar de la revuelta política española y por ende, las vasca, el suelo electoral e ideológico antiespañol en Euskadi, se ha mantenido siempre intacto, con apenas variaciones. Y el contexto socioeconómico de los últimos años, ha ido alimentando esa idea de que las clases «trabajadoras» deben buscar alternativas a los sistemas políticos de gobierno que permitan superar esos «modelos desfasados, obsoletos» que «oprimen a las clases trabajadoras».
En fin, creado el monstruo a finales de la dictadura, álgido en la década de los 80 y 90, caída a mínimos y desarticulación de ETA, gracias a la labor policial ( a pesar de los políticos empeñados en lo contrario…), vuelve a resurgir el movimiento radical vasco, gracias a una ideología y a una coyuntura, que alimenta y protege a sus ideólogos, los patrocina, los promueve y que considera que la violencia es una herramienta legítima y necesaria.