El rey Felipe VI ha entregado este miércoles en Madrid los despachos a los 76 integrantes de la 63ª promoción de la Carrera Fiscal y les ha recordado los principios constitucionales que deben guiar su labor, así como las exigencias de ética profesional y compromiso con el servicio público y el Estado de derecho.
El acto, celebrado en el Centro de Estudios Jurídicos, ha supuesto el primer compromiso institucional de la nueva fiscal general del Estado, Teresa Peramato, que ha tomado posesión del cargo hace una semana, tras conocerse la sentencia que ha inhabilitado a su antecesor, Álvaro García Ortiz, por un delito de revelación de datos reservados relacionados con la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
En su intervención, el monarca ha felicitado a los nuevos fiscales por su incorporación al servicio del Estado tras haber demostrado no solo conocimientos técnicos, sino también responsabilidad, criterio y valores imprescindibles para el ejercicio de sus funciones. Felipe VI les ha pedido que mantengan siempre presentes los principios constitucionales que orientan su trabajo y ha subrayado que su labor tendrá un impacto directo en la sociedad.
Ética, prudencia y servicio público
“Vuestro trabajo exigirá sensibilidad, humanidad, prudencia, ética profesional y un hondo compromiso con el servicio público. Un compromiso con los ciudadanos y con el Estado de derecho que es lo que da sentido a vuestro ejercicio profesional”, ha afirmado.
También ha intervenido el ministro de Justicia, Félix Bolaños, quien ha destacado que más del 75% de la promoción está integrada por mujeres y ha subrayado el “honor” que supone que tanto el Consejo General del Poder Judicial como la Fiscalía General del Estado estén presididos por mujeres. “Estas cosas no caen del cielo”, ha señalado, antes de añadir que, aunque hay errores tanto de hombres como de mujeres, los comportamientos que han avergonzado a las instituciones han sido mayoritariamente protagonizados por hombres.
Bolaños ha insistido en que la Fiscalía es una pieza fundamental del Estado de derecho y ha asegurado a los nuevos fiscales que pueden contar con el respaldo del Gobierno para ejercer su labor con imparcialidad, autonomía y rigor, especialmente ante el futuro traspaso de la investigación penal al Ministerio Fiscal.
Primer acto de Peramato
En su primer acto institucional, Teresa Peramato ha agradecido al rey su presencia, que ha definido como un respaldo institucional al conjunto del Ministerio Fiscal. En su discurso, ha recordado a los nuevos fiscales que “de la ley solo cabe incertidumbre, desprotección y arbitrariedad” y ha subrayado que “no somos dueños de la Justicia, sino sus servidores”.
La fiscal general del Estado ha animado a los nuevos miembros de la carrera a proteger a los más débiles frente a los poderosos y a garantizar que la norma sea un refugio, no una amenaza. Ha recordado la frase “donde la ley termina, comienza la tiranía”, atribuida a Francis Bacon, y ha insistido en que el Ministerio Público es garante del derecho y defensor de los más vulnerables. “Detrás de cada expediente, juicio o procedimiento hay personas con historias, sufrimientos y esperanzas”, ha señalado.
Al acto han asistido también la presidenta del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo, Isabel Perelló, y el secretario de Estado de Justicia, Manuel Olmedo. Durante la ceremonia, el rey ha impuesto además la Cruz Distinguida de Segunda Clase de San Raimundo de Peñafort a Lidia Ojeda, número uno de la promoción.
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