La Policía Nacional ha desarticulado en Sevilla una organización criminal de carácter internacional dedicada presuntamente al tráfico de personas entre Colombia y España. El entramado captaba a mujeres y hombres en "situación de extrema necesidad" en su país de origen y les ofrecía un “pack de viaje” para llegar a España, a cambio de una deuda que podía alcanzar los 5.000 euros.

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La operación se ha saldado con la detención de ocho personas en la capital andaluza, entre ellas los principales responsables de la red. Según la investigación, al menos 22 personas habrían entrado en España mediante este sistema.

La organización operaba tanto en España como en Colombia. En el país sudamericano contaba con miembros especializados en la captación de personas en situación de vulnerabilidad, a quienes ofrecían la posibilidad de viajar a España para trabajar en el cuidado de personas dependientes o en el sector de la restauración.

Un "pack de viaje" para las víctimas

Para ello, el entramado ofertaba un “pack de viaje” que incluía el desplazamiento en avión y la supuesta permanencia en el país. Las víctimas asumían una deuda de entre 4.000 y 5.000 euros y viajaban haciéndose pasar por turistas, siguiendo instrucciones precisas para superar los controles fronterizos. También recibían dinero en efectivo que debían devolver inmediatamente tras su llegada.

Una vez en España, la red actuaba como una agencia de colocación, buscando empleo a las víctimas. Los trabajos se localizaban principalmente en el cuidado de personas en la provincia de Sevilla y en establecimientos de restauración en la provincia de Cádiz.

En este último caso, la organización facilitaba documentación ajena, de personas regularizadas o vinculadas al grupo, para permitir altas laborales irregulares, a cambio de 200 euros mensuales. Los titulares reales de esa documentación se beneficiaban posteriormente de las prestaciones por desempleo generadas.

Cuando las víctimas no podían afrontar las cuotas de la deuda contraída, la organización recurría a amenazas directas contra sus familiares en Colombia. Algunas de ellas se vieron obligadas a abandonar sus hogares y cambiar de ciudad para evitar represalias.

Las pesquisas se iniciaron a raíz del análisis de información obtenida durante una operación policial desarrollada en 2024 contra una red dedicada a la trata de seres humanos. De ese trabajo surgieron indicios sobre la existencia de otra organización criminal, perfectamente estructurada y asentada en Sevilla, dedicada al traslado irregular de ciudadanos colombianos.

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