Da igual que lo bloquees manualmente. Google sabe dónde estás en todo momento, incluso cuando el usuario desactiva la localización en las aplicaciones. Da igual que el móvil no esté conectado a internet: registra nuestros movimientos, los almacena y, cuando nos conectamos de nuevo a la red, envía todos los datos a los servidores del gigante de internet.

Ese es el resultado de una investigación de Quartz, que ha determinado la práctica que Google lleva utilizando todo el año para aumentar los servicios que da a los anunciantes. Desde la compañía han negado rápidamente que hayan utilizado o almacenado estos datos, alegando que únicamente servían para notificaciones y mensajes de servicio como tráfico o tiempo, pero lo cierto es que sí se servían de ellos con fines comerciales.

"En enero dejaremos de utilizar Cell ID", han dicho. Así se llamaba el servicio en el que, no está demasiado claro cómo, transmitían los datos almacenados en las torres a los servidores del buscador. "Pero esta herramienta está muy separada de los servicios de localización que ayudan a las apps", han afirmado.

Estas torres localizaban los dispositivos con Android, todos ellos incluidos ya fueran smartphones o tablets, cuando entraban en su radio de alcance. Si el usuario estaba en un núcleo urbano rodeado por varias de estas construcciones se podía incluso discernir su posición exacta, con lo que eso significa a niveles de privacidad. Y no era opcional: Google lo hacía incluso cuando el usuario ponía todo de su parte para mantener esa intimidad.

El tratamiento que los gigantes de internet hacen de los datos personales siempre está cuestionado. Este mismo miércoles se supo que Uber sufrió un ataque informático que dejó al descubierto los datos de hasta 57 millones de personas, una circunstancia que la plataforma de transporte ocultó pudiendo incurrir en fraude. Una vez más, los grandes afectados fueron los usuarios que habían confiado sus nombres, direcciones de email o números de teléfono a la aplicación, que no los protegió lo suficiente.

La herramienta de localización de Google es, además, una de las más precisas de todo el ecosistema de internet. El buscador es capaz de conocer si hemos entrado en una u otra tienda, si estamos tomando un café en el bar de siempre o no e incluso nuestro habitual trayecto a casa o el trabajo.