La vigilancia masiva de la población civil no es un tema que nos pille de sorpresa, multitud de libros, series y películas nos han advertido a lo largo de los años de su llegada y consecuencias. 1984 con su Gran Hermano, Person of Interest, Black Mirror... las referencias son numerosas. Sin embargo ahora hay un nuevo componente a tener en cuenta: es real.

China ha puesto en marcha desde hace varios años sistemas de detección y vigilancia en grandes ciudades, pero ahora ha dado un nuevo paso al comenzar a utilizar gafas que permiten a los agentes de policía identificar en tiempo real a los transeúntes. Estos dispositivos permiten ampliar las áreas de vigilancia a las que no se podía acceder por medio de cámaras fijas.

Se podrá identificar a uno de los 1.300 millones de habitantes de China en tan solo 3 segundos

Muchas empresas tecnológicas han colaborado en el desarrollo de esta tecnología con distintas agencias del gobierno chino, que se estima que pronto puede tener archivados en bases de datos la información de sus 1.300 millones de habitantes, y que pueden ser identificados en tan solo tres segundos.

La policía encargada de vigilar la estación de tren en Zhengzhou, la capital de la provincia de Henan, es la primera en el país en utilizar el reconocimiento facial a través de estas gafas para identificar a los pasajeros, según ha publicado el Periódico del Pueblo (diario oficial chino). El personal de seguridad de la estación East Realway recibió dichas gafas para ayudar a verificar la identidad de los viajeros justo antes del inicio de la celebración del Año Nuevo Chino, un periodo de gran movimiento, lo que les ha permitido detectar viajeros sin billetes e incluso atrapar  criminales. Las gafas, que recuerdan a las famosas Google Glass, están conectadas con la base de datos de la Policía para comprobar si los pasajeros figuran en el listado de criminales, y desde el comienzo de su uso se han arrestado siete personas sospechosas de estar involucradas en un secuestro y varios robos y tirones.

Las gafas cuentan con una cámara en el lado derecho y están conectadas a un dispositivo parecido a un smartphone que, en constante comunicación con la base de datos de la policía, accede a la identidad de las personas escaneadas, pudiendo obtener más información como su dirección, raza, sexo, trabajo e incluso su historial de navegación en internet.

China está desarrollando un ambicioso plan para impulsar el sector de la Inteligencia Artificial durante los últimos años y una de sus ramas de mayor proyección es la implantación del reconocimiento facial por parte de los departamentos de policía de las principales ciudades del páis. Shanghai lo ha utilizado para identificar y multar a conductores que infringen las normas mientras que en Qingdao se utilizó durante el famoso Festival de la Cerveza para detener a docenas de sospechosos de realizar actos delictivos.