El director del FBI, Christopher Wray, ha afirmado en una entrevista a FOX News, que los orígenes de la pandemia de COVID-19 probablemente se originaron en un incidente de laboratorio en Wuhan, China.

La semana pasada salieron a luz las conclusiones de un estudio del Departamento de Energía de Estados Unidos al que tuvo acceso el diario The Wall Street Journal, y que confirmaban que lo más probable es que el virus del SARS-CoV-2 que causó la pandemia iniciada en 2020 se propagara debido a un accidente en un laboratorio chino.

Así lo ha afirmado también el presidente del FBI, que ha añadido que "el gobierno de China ha estado haciendo todo lo posible para tratar de frustrar el trabajo aquí, el trabajo que estamos haciendo, el trabajo que nuestro gobierno de EEUU y socios extranjeros cercanos están haciendo".

El informe de los servicios secretos entregado a la Casa Blanca y varios congresistas se basa en nuevos datos de inteligencia pero reconoce que otros departamentos e informes previos del Departamento de Energía no se alinean con esta conclusión y por tanto merece «baja confianza».

Otras agencias estadounidenses, en cambio, atribuyen la propagación del virus a un contagio natural mientras otros organismos todavía no se han decidido al respecto.