El ministro consejero de la embajada de Ucrania en España, Dmytro Matiuschenko, ha denunciado este jueves que "las tropas rusas han entrado en Ucrania como lo hizo Hitler en su tiempo" y ha pedido una "respuesta contundente" por parte de la comunidad internacional porque, afirma, "ya no es el momento de las palabras de apoyo, sino de acciones prácticas". 

El 'número dos' de la embajada ha ofrecido una rueda de prensa con motivo del ataque a gran escala perpetrado por Moscú este jueves, después de que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunciase por televisión una inminente "operación militar especial" para "desnazificar" el país. Una invasión que en las primeras horas ya ha dejado decenas de muertos, entre ellos varios niños, ha detallado Matiuschenko.

"Es el momento de apoyo práctico a Ucrania, no solo a nivel multilateral, sino bilateral. [El país] necesita apoyo humanitario y chalecos antibalas para aumentar sus capacidades defensivas", añadió, haciendo mención a España entre los países a los que Kiev pide ayuda para afrontar el conflicto.

En relación con lo acontecido y a una posible entrada de su país en la OTAN, Matiuschenko ha lamentado que "ningún otro país de la UE y la OTAN ha pagado el precio que ha pagado Ucrania por querer decidir su futuro". Y por ese alto precio llama a aplicar "sanciones masivas" para aislar a Rusia así como a dejar de comprar gas ruso, además de un mayor apoyo financiero a Kiev por parte de sus aliados. "Lo importante es prohibir el comercio energético con Rusia. Hay que dejar de comprar gas ruso, ya que de ahí proviene gran parte de los beneficios económicos que obtienen".

También pide sancionar al banco central de Rusia, a bancos privados rusos, congelar activos rusos en el extranjero y expandir las sanciones contra el Kremlin y sus familiares.

El encargado de negocios insiste en que Rusia "se ha equivocado" al pensar que las tropas ucranianas no reaccionarían a la agresión, y afirma que los militares ya han causado bajas en el bando ruso, con al menos 100 soldados muertos, varios tanques quemados y ocho cazas abatidos.

Desde la embajada observan con especial preocupación el avance de los combates en las inmediaciones de Chernobyl. Un fallo en estas ofensivas, alertan, podría desencadenar otro accidente nuclear. "Puede ocurrir lo que ya ocurrió en 1986. Por eso, tenemos que ser unánimes tanto en las palabras como en las acciones", advierte Matiuschenko.

En la misma línea, ha criticado la falta de democracia en el país vecino y asegura que el pueblo ruso también sufrirá "los daños" de la "política agresiva " del Kremlin.

La guerra ha comenzado esta madrugada, después de que Putin se dirigiera a la nación a través de un discurso televisado donde advertía de una "operación militar especial" en suelo ucraniano. Las tropas rusas perpetraron un ataque a gran escala desde las fronteras rusa y bielorrusa y la península de Crimea. Ya son 30 las ciudades que han sido bombardeadas, entre ellas la capital, hacia donde avanzan las tropas.

El Pentágono asegura, por su parte, que Moscú ha lanzado en total más de 100 misiles balísticos con el objetivo de despedazar el gobierno ucraniano, liderado por Volodimir Zelensky, quien ha respondido a la agresión llamando a provocar "el mayor número de pérdidas posibles" entre las tropas del Kremlin.