Europa | Internacional

Putin, a la defensiva, en el Día de la Victoria: "El horror de una guerra mundial no debe repetirse"

El líder ruso acusa a Occidente de preparar una ofensiva en el Donbás y en Crimea para justificar la invasión

Vladimir Putin, durante su discurso por el Día de la Victoria

Vladimir Putin, durante su discurso por el Día de la Victoria, este lunes.

Rusia conmemora el 77º aniversario del Día de la Victoria en guerra con Ucrania y enfrentada como nunca antes desde el fin de la Segunda Guerra Mundial con Europa. El líder ruso, Vladimir Putin, ha dicho que "nadie olvidará las lecciones de la Segunda Guerra Mundial de modo que no habrá lugar en el mundo para los nazis" y ha añadido: "El horror de una guerra mundial no debe repetirse". Lo que él declaró como "una operación militar especial" de "desnazificación" lleva ya 75 días en curso.

Putin no habla de guerra y asegura que Rusia actúa en defensa propia: "Por la seguridad del Donbás". Ha acusado a Occidente de tener planes de invadir el Donbás el año pasado. De ahí que lanzara "un ataque preventivo". "Estados Unidos y sus satélites estaban amenazándonos y el peligro crecía cada día", ha dicho Putin, que ha acusado a Washington de "apoyar el nazismo en Ucrania" con armamento militar. Ha señalado que EEUU y la OTAN se negaron a escuchar los llamamientos de Rusia para crear un nuevo sistema de seguridad. No ha hecho ningún anuncio especial, a pesar de las expectativas creadas.

En su discurso ha combinado alusiones a la Segunda Guerra Mundial y a la "operación militar especial" que libra ahora Rusia en Ucrania, según la visión del Kremlin. Ha elogiado a los aliados en la guerra contra el régimen nazi. A la par, ha destacado que EEUU quería imponer su ideología tras la caída de la URSS, incluso humillando a sus satélites.

Ha recordado a los caídos en la guerra en Ucrania a los que ha dedicado un minuto de silencio. "Recordamos cómo los enemigos de Rusia querían utilizar a las bandas de terroristas internacionales. Nuestros soldados luchan y se salvan juntos. Estamos defendiendo aquello por lo que lucharon nuestros padres, abuelos y bisabuelos: el bienestar y la seguridad de la patria. Para nosotros lo más importante es la independencia de nuestra patria".

Las palabras de Putin demuestran que Rusia no tiene victoria de la que presumir. Ni siquiera ha aludido a Mariúpol, que agoniza desde hace semanas. Parece limitar su interés al Donbás, ya que sus alusiones se han centrado en esta zona, de la que ya dominaba una tercera parte a través de las llamadas repúblicas populares. A su vez, da la impresión de que no le interesa elevar la tensión, ya que no ha esgrimido la amenaza nuclear. Ha focalizado sus críticas en EEUU con el objetivo de dividir a los aliados de Washington. En suma, un discurso que sigue sin dar pistas sobre los objetivos de Putin.

Exhibición de músculo militar

Al desfile militar, con 11.000 soldados, no ha asistido ningún mandatario extranjero. El año pasado, cuando sí hubo parada a pesar del coronavirus, solo estuvo el presidente de Tayikistán, Emomali Rahmon, porque estaba de visita. Lejos queda aquel 65º aniversario cuando la canciller alemana, Angela Merkel, estaba en la tribuna de invitados.

La victoria sobre el nazismo fue crucial para la URSS que perdió a más de 26 millones de personas en la contienda. Para la URSS es la Segunda Guerra Patriótica y empezó en junio de 1941, cuando el régimen nazi invadió la URSS. La caída de Berlín obsesionó a Stalin. La rendición se firmó el 8 de mayo de 1945, antes de la medianoche hora europea. Ya era 9 de mayo en Moscú. Por ello el fin de la Segunda Guerra Mundial o Segunda Guerra Patriótica se celebra el 8 de mayo en Europa y el 9 en Rusia.

"El foco de la agresión alemana en Europa está exterminado", dijo el mariscal Zhukov en el primer desfile el 24 de junio, que había entrado en la Plaza Roja a lomos de un corcel blanco. Ardieron los estandartes nazis.

Esta jornada se declaró festiva en la Unión Soviética en 1965, cuando se conmemoró el vigésimo aniversario. En los pueblos y ciudades de la URSS y otros países de la órbita soviética se rendía homenaje a los caídos en la guerra. Todos tienen a alguien a quien recordar, de ahí la popularidad de esta fiesta.

En 2012 tres periodistas dieron forma a la Marcha del Regimiento Inmortal, inspirados en esos homenajes espontáneos. El pueblo desfila con fotografías de las víctimas. Empezó como iniciativa ciudadana pero el Kremlin se lo ha apropiado ya que ayuda a reforzar su relato sobre la Segunda Guerra Patriótica, una guerra que cuentan como si solo la hubiera ganado la URSS.

Putin ha reforzado el componente militar de la jornada. El desfile muestra el músculo del Kremlin. En este 2022 más que nunca. En el cielo los aviones iban a dibujar la Z, símbolo del apoyo a Putin, pero se canceló esta demostración por dificultades meteorológicas. Después de muchas interpretaciones ahora se dice que son los dos 7, del 77 aniversario, uno encima del otro.

El domingo el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, reprochó en un video grabado en blanco y negro en al Kremlin que se haya olvidado del "nunca más" con el que conmemoraba el aniversario e la derrota de la Alemania nazi. "Decías nunca más. Decídselo a Ucrania. El 24 de febrero se borró la palabra nunca. Balas y bombas. Cientos de cohetes despertaron a toda Ucrania. Escuchamos terribles explosiones y seguimos escuchándolas una y otra vez", dijo Zelenski, ante edificios derribados por los bombardeos rusos en Borodianka. "El mal ha vuelto", sentenció.

"Ucrania no dejará que Rusia se apodere de la victoria sobre el nazismo... Vencimos en 1945 y venceremos hoy", ha añadido antes de que hablara Putin. En Ucrania este lunes no se ha celebrado el Día de la Victoria.

Desde Berlín, el canciller alemán, Olaf Scholz, dio su discurso sobre el final de la Segunda Guerra Mundial en la noche del domingo 8 de mayo. Scholz destacó que la lección del pasado es el "nunca más" a la guerra, el genocidio y la tiranía. "Estoy profundamente convencido. Putin no ganará la guerra. La libertad y la seguridad prevalecerán, como triunfaron hace 77 años".

Con Scholz se ve en la tarde del lunes el presidente francés, Emmanuel Macron, en Berlín. Macron, que ha renovado su mandato el sábado, y Scholz subrayarán la vigencia del eje franco-alemán. Celebrarán juntos el Día de Europa, después de los eventos en Estrasburgo.

Todas las claves de la actualidad y últimas horas, en el canal de WhatsApp de El Independiente. Únete aquí

Te puede interesar