Ucrania está recibiendo electricidad de Rumanía, Eslovaquia y Polonia para mantener el suministro tras el ataque masivo ruso que tuvo lugar durante la pasada madrugada, dirigido principalmente a su sistema energético. Una ofensiva perpetrada con cerca de 90 misiles y más de 60 drones.

“Para apoyar el funcionamiento seguro del sistema, se ha recurrido a asistencia de emergencia de Rumanía, Eslovaquia y Polonia”, anunció Ukrenergo, la empresa nacional de electricidad, en un comunicado. Además, la nota agrega que los trabajos de reparación de las infraestructuras dañadas continuarán durante toda la jornada hasta que todos los usuarios vuelvan a tener luz.

El ministerio de Energía ucraniano ha anunciado cortes programados de emergencia del suministro en las regiones de Dnipropetrovsk, Sumi, Donetsk, Zaporiyia, Odesa, Járkov, Poltava y Kirovograd para estabilizar las operaciones del sistema.

Una de las infraestructuras dañadas ha sido la mayor central hidroeléctrica de la región suroriental de Zaporiyia. Según la empresa a cargo de la central, dos misiles rusos han impactado directamente contra una de las estaciones que forman parte de la infraestructura, provocando graves daños en la misma.

Las autoridades ucranianas han descrito la oleada de misiles y drones rusos de la pasada madrugada "como el mayor ataque reciente contra el sistema energético ucraniano".

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, a través de un mensaje en la red social X, se ha solidarizado con las víctimas y afectados por este nuevo ataque de Rusia sobre lo población civil de su país: "El mundo ve cuáles son los objetivos de los terroristas rusos: centrales eléctricas y líneas de suministro de energía, una presa hidroeléctrica, edificios residenciales corrientes e, incluso, un trolebús. Rusia está en guerra con la vida cotidiana de la gente. Mi más sentido pésame a los seres queridos de los asesinados por este terror".