WikiLeaks ha anunciado este lunes en su cuenta de X que Julian Assange ha abandonado la prisión de alta seguridad británica en la que permanecía recluido y que se ha marchado del Reino Unido camino de su país, Australia. Organizaciones defensoras de la libertad de prensa llevaban años pidiendo su liberación y su esposa, Stella, venía liderando una campaña en su defensa con la participación de famosos y personalidades políticas.

"Después de más de cinco años en una celda de 2x3 metros, aislado 23 horas al día, pronto se reunirá con su esposa Stella Assange y sus hijos, que solo han conocido a su padre tras las rejas", afirma el portal en su mensaje, que concluye diciendo: "La libertad de Julian es nuestra libertad". WikiLeaks también ha publicado un vídeo en el que se ve a Assange revisando unos papeles y, posteriormente, subiendo a pie la escalerilla de un avión.

Queda libre tras alcanzar un acuerdo con el departamento de Justicia de Estados Unidos. Estaba acusado de hasta 18 delitos por violar la ley de Espionaje como consecuencia de una de las mayores filtraciones de información clasificada en la historia de EE.UU., en 2010, cuando fueron revelados secretos de las guerras de Irak y Afganistán, así como datos sobre los detenidos que había en la base de Guantánamo, entre otros asuntos.

Esta declaración de culpabilidad la realizará el propio Assange en una comparecencia prevista para el miércoles a las 9:00 hora local en un tribunal de las Islas Marianas, un territorio estadounidense en el océano Pacífico, según una carta del departamento de Justicia presentada ante el juzgado. Según el acuerdo, que aún debe ser aprobado por un juez, Assange solo sería sentenciado a 62 meses de prisión, equivalentes al tiempo que ya ha cumplido en la cárcel de alta seguridad de Belmarsh, donde ha permanecido 1.901 días.

Líderes de izquierda celebran la liberación de Julian Assange

Presidentes y líderes de izquierda han expresado su alegría por la liberación del fundador de WikiLeaks tras haber firmado un acuerdo de culpabilidad con el departamento de Justicia estadounidense.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha sido uno de los primeros líderes en reaccionar a la noticia hecha publica este lunes: "Celebro la salida de Julian Assange de la cárcel. Cuando menos en este caso, la Estatua de la Libertad no quedó como un símbolo vacío; está viva y contenta como millones en el mundo", apuntó en un mensaje en la red social X.

Por su parte, Claudia Sheinbaum, presidenta electa de México, ha recordado que el pasado mes de febrero entregó las Llaves de la Ciudad a la familia de Julian Assange: "Para nosotros Julian representa la verdad, la libertad de expresión. Somos una Ciudad progresista que siempre ha defendido las grandes libertades y el derecho al libre acceso a la información".

Miguel Díaz-Canel Bermúdez, presidente de Cuba, se ha pronunciado en la misma línea: "El largo y cruel castigo que le impusieron por sus denuncias de los crímenes imperiales, quedará en la memoria de los pueblos como prueba de cuán poco creen sus carceleros en la libertad de prensa", ha dicho en X.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, también ha celebrado la liberación de Assange, a quien ha descrito como un "ejemplo de coraje y valentía en la batalla por la verdad". Su homólogo en Colombia, Gustavo Petro, ha definido su encarcelamiento como "un atentado contra la libertad de prensa a escala global. Denunciar la masacre de civiles en Irak por parte de la acción bélica de EE.UU. fue su crimen, ahora la masacre se repite en Gaza".

En Australia, el primer ministro, Anthony Albanese, también ha celebrado su puesta en libertad. "No hay nada que ganar con su encarcelamiento y lo queremos de vuelta en Australia". El dirigente laborista británico Jeremy Corbyn, el país en el que ha permanecido desde que fue acusado, ha manifestado en un escueto mensaje que "su encarcelamiento fue, y siempre será, un grotesco error judicial".