Los judíos no son un bloque monolítico. Y tampoco todos los judíos del mundo apoyan a Israel y la élite política que lleva 20 meses condenando al plomo y al hambre a la población de la Franja de Gaza. Contra los lugares comunes y el intento israelí de mostrarse como portavoz de todos los creyentes de la Torá del planeta se rebela el rabino Yisroel Dovid Weiss, el rostro visible del movimiento Neturei Karta, un grupo que denuncia al sionismo, la doctrina que en 1948 sirvió de combustible para la creación del Estado de Israel y que mantiene contra viento y marea un sistema que organizaciones de derechos humanos consideran un modelo de apartheid y violencia política.

“Los sionistas se adhieren al judaísmo, pero son como un cáncer, un tumor para el judaísmo. Porque no es judaísmo. El judaísmo es cumplir las leyes de la Torá. El sionismo es un movimiento nacionalista que decidió crear su hogar nacional. Son los peores enemigos de los judíos”, replica Dovid Weiss en una extensa entrevista con El Independiente, en mitad de una nueva ofensiva terrestre israelí en la martirizada Gaza y con la creciente presión internación sobre el Gobierno de Netanyahu.

Weiss es un rabino judío haredi (ultraortodoxo) estadounidense. Nacido en 1952 en Estados Unidos, sus raíces familiares se hallan en Polonia y Hungría, donde perdió a buena parte de su familia durante el Holocausto. Incasable y disidencia del relato que defiende la necesidad de un Estado judío, Weiss es portavoz de Neturei Karta (“guardianes de la ciudad” en arameo), un grupo judío ultraortodoxo fundado en Jerusalén en 1938. Su férrea oposición al sionismo y su creencia de que  los judíos tienen el mandato divino de permanecer en el exilio y no deben intentar establecer la soberanía en la Tierra de Israel mediante esfuerzos humanos son los motores del movimiento.

P.- La Franja de Gaza sigue, por desgracia, en primera línea informativa…
R.- Lo que ocurre en Gaza es una extensión de los 76 años de ocupación de Palestina, que ha alcanzado su punto máximo con la matanza sistemática que el mundo está viendo en tiempo real. Están exterminando a un pueblo, día tras día, con excusas falsas. Incluso los niños y bebés, que son inocentes por definición, están siendo asesinados y el mundo lo permite. La comunidad internacional observa, y en lugar de detener esta barbarie, a veces incluso legitima al responsable, el primer ministro Benjamín Netanyahu. En Estados Unidos, a Netanyahu se le recibe y agasaja. Debería ser expulsado. Es incomprensible que se permita esto. Se está torturando a toda una sociedad. Se les priva de agua, de atención médica, de alimentos; es impensable. Lo que está sucediendo es obra del mal, es realmente satánico. No hay justificación alguna.

Israel No es nuestro país. Es el invento de un grupo de criminales

P.- ¿Qué papel juega la religión en este conflicto?
R.- El sionismo ha logrado presentar este conflicto como una lucha religiosa entre judíos y musulmanes. Eso es completamente falso. El pueblo judío ha convivido con los musulmanes durante siglos. En Jerusalén, las tres religiones han coexistido. La religión no es una barrera para la paz. El problema es el sionismo, que ha deshumanizado a los palestinos y los presenta como antisemitas. Esta es una estrategia para justificar sus acciones, pero es una completa falsedad. Ellos comparan al pueblo palestino con plagas; como si fueran insectos que deben ser exterminados con insecticida y se justifican diciendo que es necesario eliminarlos. Esto es abominable. Eso es exactamente lo que hacen: deshumanizan al otro para justificar lo injustificable. Es exactamente la misma lógica que usaron los nazis contra los judíos.

P.- ¿Qué es el Estado de Israel para usted?
R.- Israel es el invento de un grupo de criminales. Fue creada por un grupo de herejes, personas que se unieron, muchas de ellas de fe judía, casi en su totalidad al principio, y personas que ya se habían alejado de Dios y habían dicho claramente que eran rebeldes, que no querían aceptar el judaísmo ni la Torá. Se burlaban, despreciaban, escupían y se reían totalmente de la cuestión de la piedad. Eran los llamados sionistas. Era un grupo de personas que simplemente se habían reunido en Europa.

E Israel es una entidad creada por personas que se apartaron de la fe judía. Los primeros sionistas eran herejes que se burlaban de la religión. Decidieron crear un Estado nacional en Palestina, apropiándose del nombre "Israel", un término sagrado, y de Sion, que representa Jerusalén. Esto no tiene nada que ver con el judaísmo verdadero. El judaísmo es una religión de 3.000 años de historia, dedicada a servir a Dios. Nosotros aceptamos la Torá y los mandamientos, y desde la destrucción del Templo hace 2.000 años, hemos estado en el exilio por decreto divino.




Israel debe desaparecer de forma pacífica, como el apartheid en Sudáfrica

P.- ¿Puede explicar ese concepto de exilio desde el punto de vista religioso?
R.- Cuando el Templo fue destruido, Dios impuso al pueblo judío tres juramentos: no regresar en masa a la Tierra Santa, no rebelarse contra las naciones, y no intentar poner fin al exilio. Durante 2-000 años, los judíos han seguido estos mandamientos. Sufrimos la Inquisición, las cruzadas y el antisemitismo en Europa. Pero nunca intentamos crear un estado soberano. Lo aceptamos como voluntad divina. El sionismo rompía con todo esto.

P.- ¿Qué diferencia hay entre judaísmo y sionismo?
R.- Son antítesis. El judaísmo es sumisión a la voluntad divina. El sionismo es nacionalismo. El judaísmo cree en la protección divina; el sionismo dice que nos protegeremos con armas. El sionismo promueve la desobediencia a Dios, presentando una visión secular y materialista. Por eso todos los grandes rabinos del mundo, desde Yemen hasta Polonia, se han opuesto al sionismo. Han dicho que es una rebelión contra Dios.

P.- ¿Son los sionistas enemigos de los judíos?
R.- Lamentablemente, sí. El sionismo ha traído odio al pueblo judío. Nos ha puesto en peligro. Han convertido nuestra religión en un movimiento político. Por eso nos manifestamos. El mundo no debe confundir el judaísmo con el sionismo. Son cosas completamente diferentes. Los sionistas son la personificación del antisemitismo: matan en nombre de los judíos, provocan odio, y ponen en riesgo a los judíos religiosos que nada tienen que ver con sus crímenes.

Solo viviremos en paz bajo una Palestina libre

P.- Mencionó que el sionismo ha transformado el judaísmo. ¿Podría desarrollar esa idea?
R.- El sionismo ha reemplazado la identidad espiritual del judío por una identidad nacionalista. Ahora se mide el orgullo judío por medallas olímpicas, los premios Nobel o el poder militar. Eso no es judaísmo. El judaísmo siempre ha sido humildad, servicio a Dios, estudio de la Torá, compasión. Convertir eso en nacionalismo y orgullo militar es arrancar el alma del pueblo judío.

P.- Israel fue creado en 1948. Hasta ahora los gobiernos occidentales le habían apoyado, con el silencio a menudo cómplice de algunos medios…
R.- Es inadmisible. No solo guardan silencio, sino que muchos gobiernos de Occidente están proporcionando apoyo militar y legitimidad política al Estado de Israel. Las bombas que caen sobre Gaza vienen de países que afirman defender los derechos humanos. Y cuando alguien se atreve a denunciarlo, es acusado de antisemita, lo cual es una táctica cínica para callar la verdad.

P.- Precisamente se use el antisemitismo para denunciar a los críticos del Estado de Israel…
R.- Es una confusión intencionada. El sionismo ha trabajado durante décadas para identificar toda crítica hacia Israel como antisemitismo. Pero eso es falso. Nosotros somos judíos religiosos y estamos en contra del sionismo precisamente por nuestra fe. El verdadero antisemitismo es odiar al judío por su identidad, su religión, por ser quien es. Pero el sionismo ha creado un "falso antisemitismo" como arma política. Así silencian las críticas legítimas y protegen sus intereses. Eso es muy peligroso porque banaliza el antisemitismo real y hace que el mundo se canse de oír esa palabra cuando de verdad se necesite.

P.- Entiendo que ustedes mismos han sido acusados de antisemitas…
R.- Absolutamente. Hemos sido objeto de amenazas, agresiones físicas, campañas de difamación. Uno de nuestros rabinos fue atacado con ácido y perdió un ojo. En muchos lugares, los judíos religiosos antisionistas no se atreven a hablar públicamente por miedo a represalias. Algunos han sido despedidos, acosados o incluso golpeados. Vivimos bajo presión constante, pero seguimos adelante porque sabemos que decir la verdad es un deber religioso. Callar sería un pecado. Hay muchos más que están de acuerdo con nosotros, pero el miedo los paraliza. Por eso es tan importante alzar la voz.




La acusación de antisemita es una táctica cínica para callar la verdad. Son los sionistas los verdaderos antisemitas

P.- ¿Encuentra paralelismos entre el Holocausto y lo que sucede en Gaza?
R.- Hay similitudes en el sufrimiento y la matanza indiscriminada. Aunque los nazis querían erradicar al pueblo judío, e Israel quiere expulsar a los palestinos, ambos actos implican deshumanización y genocidio. No se puede justificar lo que ocurre en Gaza.

P.- ¿El sionismo explota el Holocausto?
R.- Absolutamente. Los sionistas usan el Holocausto para justificar la creación del Estado de Israel y silenciar las críticas. Incluso se opusieron a rescatar judíos durante la guerra para luego usar su sufrimiento como justificación. Esto es un abuso inmoral del recuerdo de nuestras víctimas.

P.- Qué les diría a los mandatarios occidentales…
R.- Ustedes han sido puestos en posiciones de poder con un propósito. No desperdicien ese don. No se dejen intimidar por la propaganda sionista. No confundan el sionismo con el judaísmo. Hagan lo correcto: denuncien esta ocupación, esta opresión, este genocidio. Solo así podrán decir que hicieron su parte para traer justicia y paz. Y recen. Porque la paz vendrá solo cuando reconozcamos que hay un solo Dios, y que ese Dios nos ordena actuar con compasión, justicia y verdad.

P.- ¿Ha estado en Israel?
R.- Fui una vez a estudiar a una escuela rabínica en Mea She'arim, pero no me quedé. Hoy no volvería porque nuestra comunidad se opone a la legitimidad del Estado de Israel.

P.- Se le critica, a menudo, su encuentro con líderes de Hamás…
R.- Fuimos a Gaza con ayuda médica y nos reunimos con Ismail Haniyeh. Nos abrazó y dijo que no está contra nosotros. También nos relacionamos con muchos palestinos en conferencias internacionales. No somos un movimiento político, sino religiosos que buscamos justicia.

P.- ¿Cómo ve el futuro de Israel?
R.- El Estado de Israel es ilegítimo según la Torá y debe desaparecer de forma pacífica, como el apartheid en Sudáfrica. Rezamos para que el mundo despierte y entienda que el sionismo no representa al judaísmo, y que trae sufrimiento tanto a palestinos como a judíos. El verdadero judaísmo se opone al sionismo. Solo bajo una Palestina libre podremos vivir en paz.