El general Escipión hizo sucumbir a los numantinos, irreductibles hasta entonces para los romanos, con un cerco que les condenó a morir de hambre. China ha ensayado con sus últimas maniobras militares el bloqueo de los principales puertos de Taiwán en un aviso a Estados Unidos, Japón y a los independentistas de la isla. La llamada Misión Justicia 2025 se ha realizado por sorpresa y ha implicado a la Armada y la Fuerza Aérea de la República Popular. El enfrentamiento sería una batalla entre David y Goliat, y pondría en jaque al mundo.

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El comando del teatro oriental del Ejército Popular de Liberación ha confirmado el despliegue de destructores, fragatas, cazas, bombarderos, drones y misiles de largo alcance "en las proximidades" de Taiwán. Así se pone a prueba "la coordinación mar-aire y la búsqueda y neutralización precisas de objetivos", incluidos ataques a submarinos y otros objetivos marítimos.

El lunes por la tarde, el Ministerio de Defensa de Taiwán afirmó haber detectado 28 buques de la Armada y la Guardia Costera, incluidos dos que entraron en la zona contigua de Taiwán. Al menos 89 aviones de combate, la mayor cifra diaria en más de un año, también participaron en estas maniobras. Una formación de cuatro buques de asalto anfibio, con capacidad para transportar docenas de helicópteros, se emplazaron a 160 millas náuticas al oeste del extremo sur de Taiwán.

Varios escenarios

En este primer día de maniobras, el Ejército chino simuló varios escenarios de conflicto, entre ellos ataques a objetivos marítimos y terrestres, operaciones antisubmarinas y ejercicios para lograr la "superioridad aérea regional". En comparación con anteriores ensayos bélicos, Misión Justicia 2025 abarca áreas más amplias del Estrecho y de la costa oriental de Taiwán, lo que supone un "estrechamiento del cerco" en torno a la isla.

Los medios chinos difundieron imágenes del despliegue de bombarderos H-6 equipados con misiles, de buques militares efectuando fuego de artillería en aguas próximas a Taiwán y de tropas terrestres activando sistemas de lanzamiento de proyectiles de largo alcance, según informa la agencia Efe.

Llamamiento a "fuerzas externas"

Los ejercicios con fuego real abarcaron un área más amplia que los simulacros anteriores. Así se aprecia en los mapas publicados de las zonas de alerta aérea y marítima. Algunas se superponen con la frontera territorial de Taiwán a 12 millas náuticas de su costa. Las autoridades aeronáuticas de Taiwán afirmaron que más de 100.000 pasajeros de más de 850 vuelos internacionales y nacionales programados se verían afectados, según The Guardian.

"Es un aviso, sobre todo, a Japón y a Estados Unidos. A Japón por las declaraciones de la primera ministra Sanae Takaichi sobre que una emergencia en Taiwán sería también una emergencia en Japón. En el caso de EEUU por el anuncio de venta de armas por más de 11.000 millones de dólares. Han adoptado la estrategia del erizo, es decir, llenar de armas Taiwán para dificultar cualquier ataque del Ejército de China", afirma Xulio Ríos, fundador del Observatorio de Política China. Añade que también China se dirige a los independentistas "por la dinámica en la isla por apostar casi todo a la seguridad y la doble alianza para afirmar la soberanía".

Es la primera vez que China lanza esta advertencia a "fuerzas externas". A principios de noviembre, la primera ministra japonesa, Sanae Takaichi, dijo durante un debate parlamentario que Japón considera que la defensa de Taiwán es fundamental para la seguridad de su país. Por eso, en caso de invasión china, es muy probable que los japoneses acudiesen en ayuda de los taiwaneses con sus fuerzas armadas. La declaración provocó la ira de Japón: Taiwán fue colonia japonesa entre 1895 y 1945.

En el caso de EEUU hay mayor ambigüedad. Desde 1979, las distintas Administraciones estadounidenses mantienen relaciones con la República Popular China pero no renuncian a defender Taipei. Es la llamada ambigüedad estratégica. Sin embargo, el anuncio de un envío de armas por valor superior a los 11.000 millones de dólares ha crispado a Pekín. Si finalmente se encuentran en la primavera Trump y Xi se tratará este espinoso asunto.

Taiwán refuerza su Ejército

En respuesta a los ejercicios, Taiwán acusó a Pekín de aumentar las tensiones y socavar la paz regional. Condenó la actividad y afirmó que había enviado "fuerzas adecuadas" para responder y llevar a cabo sus propias maniobras de preparación para el combate. Taiwán realiza de forma regular ensayos para preparar a su población. Las últimas tuvieron lugar el verano pasado. Taiwán sabe que en caso de ataque será vital su capacidad de defenderse. En el mejor de los casos, EEUU podría tardar un mes en llegar en su socorro.

El presidente Lai Ching-te ha anunciado un plan de 40.000 millones de dólares para reforzar las fuerzas armadas de la isla. Lai Ching-te es conocido por su línea dura con respecto a Pekín. La compra de armas estadounidenses forma parte de este plan. Taipéi también está acumulando reservas de alimentos, agua, municiones y todo lo que pueda ser necesario para sobrevivir al bloqueo chino.

En opinión de Xulio Ríos, el líder chino Xi Jinping aún no ha tomado una decisión definitiva sobre si someterá la isla por la fuerza y cómo lo hará. Pero está decidido a responder con dureza a las medidas de Tokio y Washington. Pekín considera que Taiwán, de facto independiente desde 1949, forma parte de China y que su defensa es una injerencia en los asuntos internos chinos.

El tesoro de Taiwán: los semiconductores

Pekín pretende la reunificación por la vía pacífica. Sin embargo, la inmensa mayoría de los taiwaneses declaran en las encuestas su apego al statu quo. Quieren mantener la soberanía efectiva de la isla sin que esta proclame formalmente su independencia.

Hoy en día, de los 193 países que pertenecen a la ONU, solo 11 mantienen relaciones diplomáticas con Taiwán. El resto ha apostado por las relaciones con Pekín, lo que, sin embargo, excluye el reconocimiento de la independencia de Taiwán.

Una de las bazas del país es la joya de la corona de la economía taiwanesa. Se trata de TSMC, una empresa que ha acaparado el 90 % de la producción mundial de los semiconductores más avanzados. Sin ellos, el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) no es posible. Las grandes empresas tecnológicas estadounidenses, como Apple, Amazon o Alphabet, dependen de los suministros de Taiwán. Por lo tanto, el bloqueo chino de la isla supondría una catástrofe económica mundial. La presión sobre Pekín sería enorme.

China siempre contaría con el apoyo de Rusia, que ha encontrado en Pekín el apoyo necesario para sobrevivir a pesar de las sanciones occidentales. El ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov, subrayó que Rusia y China son socios que se han prometido "apoyo mutuo en la defensa de su unidad nacional y su integridad territorial".

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