Un tribunal de apelaciones federal de Estados Unidos ha suspendido este jueves el fallo que otro tribunal emitió ayer miércoles y que paralizó la mayor parte de los aranceles del presidente estadounidense, Donald Trump, al considerar que no tiene poderes para imponerlos, al menos no de la manera en que lo hizo. El Tribunal de Apelaciones del Circuito Federal ha estimado que la orden debe ponerse en pausa, al menos por el momento y hasta que tome otra decisión.

En su fallo, el panel de tres jueces federales bloqueó ayer gran parte de los gravámenes de Trump y concedió diez días a la Administración de EEUU para aplicar la sentencia y detener las tasas, una orden que el Departamento de Justicia apeló al momento. El fallo de la Corte Internacional de Comercio estadounidense supuso un duro golpe a la principal medida hasta la fecha del segundo mandato del presidente, que buscaba dar un giro importante a las relaciones internacionales del país con el resto del mundo. 

El Departamento de Justicia había dicho ante el juez que la decisión del Tribunal Internacional de Comercio dañaba las competencias del Gobierno y que se inmiscuía en "la autoridad exclusiva de Trump" para tomar decisiones en materia de política exterior. Ya ayer la Casa Blanca protestó la decisión diciendo que las relaciones comerciales "injustas" han "diezmado" a los estadounidenses. "Han dejado a nuestros trabajadores atrás y han debilitado nuestra base industrial de defensa, que son hechos que el tribunal no disputa", dijo un portavoz del Gobierno, Kush Desai, en un comunicado.

La orden de hoy complica aún más el panorama de los aranceles, después de que otro juez diferente, el magistrado de distrito Rudolph Contreras, fallase esta mañana que los aranceles de Trump a China y a otros países son ilegales, en un caso completamente separado. Este caso avanzará en un circuito de apelaciones completamente separado, el DC Circuit.