Ahora, y no antes, es cuando la sociedad empezar a poner el foco en el problema que supone la falta de médicos y de enfermeras para atender no solamente a los enfermos por coronavirus sino a todos los demás pacientes que, en un buen número, han sido postergados porque el servicio sanitario ya no daba más de sí.

Y ahora nos encontramos con unas declaraciones de la presidenta de la Comunidad de Madrid en las que asegura que "faltan médicos en España". Claro, una afirmación así siembra de preocupación el ánimo de los ciudadanos porque la de formar a un médico no es tarea que se pueda resolver en un par de años. Se necesitan 10 años para empezar a ejercer la medicina en cualquier hospital público en España, de modo que si fuera cierto que "faltan médicos", como ha dicho la señora Ayuso, en nuestro país, estaríamos perdidos porque tendríamos que intentar contratarlos en otros países.

Pero resulta que la situación es exactamente la contraria: que hay miles de médicos, 2.000 exactamente, en el paro y otros miles, entre 5.000 y 7.000 a lo largo de los últimos años, que no han podido acceder a una plaza de MIR porque la oferta de esas plazas es mucho menor que la demanda de alumnos recién salidos de la carrera de Medicina. Es decir, que no es que estemos faltos de médicos y de enfermeras -tres mil de ellas también están en las listas del paro- sino que ni el Estado ni las comunidades autónomas están gestionando bien la necesaria cobertura de un suficiente número de profesionales de la sanidad.

El problema existía desde hace años pero es ahora, cuando desde todas las especialidades y todas las profesiones sanitarias se ha levantado la voz, cuando la opinión pública ha sido consciente de las lagunas que tiene el sistema sanitario español del que nos habíamos sentido siempre tan orgullosos. Y una de las lagunas más evidente es que se paga muy mal a los profesionales de la salud y se les ofrecen contratos inasumibles.

En el nuevo paquete de medidas con el que Madrid intenta desde este lunes afrontar la pandemia, no figuran dos […]