El Delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, ha podido calibrar hoy la exacta medida del reto que se le plantea con el encargo de descongelar la relación con la Generalitat de Cataluña en el acto de conmemoración de la Constitución. Millo ha contado para la ocasión con el Secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón y las cabezas visibles de la judicatura, el ejército, las fuerzas de seguridad y el cuerpo consular acreditado en Barcelona. Pero ni un representante del gobierno autonómico ni del Ayuntamiento de Barcelona. Con una excepción, la directora general de Relaciones Exteriores, María Badia, integrante del Departamento de Exteriores y Relaciones Institucionales que dirige Raúl Romeva.

Tampoco ha acudido a la cita el coordinador general del PP catalán, Xavier García Albiol, aunque fuentes del partido se han apresurado a aclarar que su ausencia se debe a un viaje familiar que no fue posible postergar. Sí estaban ahí el líder del PP en el Ayuntamiento, Alberto Fernández, además del portavoz de Ciudadanos en el Parlament, Carlos Carrizosa. Por el PSC, el sempiterno Josep María Sala.

Ante este auditorio Millo ha reivindicado la Constitución española como punto de encuentro entre los españoles y ha denunciado que este texto “se ha convertido en una barrera porque implica la renuncia a los maximalismos” que en su opinión pretenden imponer los independentistas. En este contexto, el Delegado del Gobierno se ha referido a la reunión que esta tarde mantendrá con el presidente de la Generalitat para anunciar que reclamará a Puigdemont “hablar de todo sin más límite que el respeto al marco legal” y ha citado como ámbitos de ese diálogo la educación, la sanidad y las infraestructuras: “Este es el espíritu que mueve al Gobierno de España al que represento, el diálogo leal”.

Cataluña es la comunidad autónoma con más traspasos de competencias, cerca de 200; son muchos y exigen mucho diálogo”

Millo ha acusado a quienes “ponen en duda el valor de la Constitución para llegar a acuerdos desde la diferencia” de ser “incapaces de renunciar a sus propuestas, reducen nuestra democracia a un juego de suma cero en el que se gana o se pierde”. Por ello ha reclamado mejorar los canales de comunicación institucionales y ha reivindicado el “gran salto cualitativo y cuantitativo” de Cataluña en estos 38 años de vigencia de la Carta Magna. “Cataluña es la comunidad autónoma con más traspasos de competencias, cerca de 200; son muchos y exigen mucho diálogo”.

“Por mucho que se quiera mirar atrás con afán revisionista y destruir lo que hemos construido con afán de enfrentamiento, ha añadido Millo, esa no es la España y la Cataluña que se vive en nuestras calles. Frente a los que abogan por el rumbo de colisión debemos poner rumbo a buen puerto, al que llegaremos con planteamiento de dialogo sereno y constructivo”.

El Delegado ha aprovechado la sede del acto, el Archivo de la Corona de Aragón que creara en el s.XIV el Rey Jaume II para recordar las crónicas de Ramon Montaner, recuperadas por Vicenç Vives: “Si estos cuatro reyes que él llamaba España fueran todos juntos nadie dudaría de su poder. No puede haber expresión más clara y más vieja de lo que somos capaces de hacer los españoles cuando estamos unidos”, ha concluido.