La madrileña calle de Gran Vía se ha sumido en la confusión este jueves festivo a primera hora de la tarde, cuando la zona ha tenido que ser desalojada ante un posible aviso de bomba. Los hechos han ocurrido hacia las 16.30 horas, después de que apareciera una maleta sospechosa en una de las calles colindantes, aunque finalmente resultó no contener ningún elemento peligroso.

La Policía Nacional recibió una llamada procedente de un hotel cercano advirtiendo de la presencia del objeto, por lo que se desplazaron al lugar agentes del cuerpo y llevaron a cabo el protocolo habitual mientras se cortaba el acceso a la zona durante quince minutos. Después de que tanto el rastreo con guías caninos y el análisis de los Tedax dieran resultados negativos, la Policía ha confirmado que se trataba de una falsa alarma pasadas las 17:30 horas.

En trabajador del hostal que dio la alarma dio avisó a la Policía en torno a las 14:15 horas al sospechar de una maleta dejada por un viajero que se había alojado en el establecimiento durante varios días. Al desplazarse al lugar, la Policía ha establecido un cordón de seguridad en los alrededores del hotel, que ha sido desalojado por iniciativa de sus responsables. Los agentes han ordenado a despejar la zona a los transeúntes en Gran Vía yhan ordenado salir a todas las personas, incluidos los trabajadores, en las tiendas próximas, por lo que algunos de los establecimientos han echado el cierre y han permanecido cerrados tras restablecerse el tráfico peatonal.