El Sindicato Unificado de Policía (SUP), la organización mayoritaria en el cuerpo con unos 29.000 afiliados, demanda inversiones para dotar a los agentes de los "recursos necesarios" para hacer frente en las mejores condiciones a la amenaza del terrorismo yihadista. Como prueba de la "insuficiencia" de medios, el sindicato recuerda que actualmente se patrulla con un fusil de asalto que el Ejército español dejó de utilizar en los años 90.

Esta reivindicación se sustancia en una de las once resoluciones que el SUP ha aprobado en su undécimo congreso nacional, que, bajo el lema Liderazgo, compromiso y cambio, se ha clausurado este jueves en Toledo con la reelección de Mónica Gracia como secretaria general. La situación de los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE), la problemática de los suicidios en la Policía y la promoción profesional y conciliación han sido otras de las materias en las que la organización ha fijado expresamente su posición y ha exigido medidas.

En su resolución, el sindicato sostiene que los avances legislativos y en materia de colaboración internacional para luchar contra el terrorismo yihadista contrastan con la "desprotección" de los policías ante un "enfrentamiento directo en un eventual ataque", debido a que no cuentan en la actualidad con los "mejores recursos" para reaccionar ante un posible acto antiterrorista.

"La eficaz dedicación y esfuerzo de nuestros compañeros no va acorde con el escaso avance de los medios con los que contamos y los elementos de seguridad de que disponemos", plantea el SUP, que considera "ínfimo" el coste de la seguridad antiterrorista en España en relación con otros países del entorno: "Basta con observar las imágenes de las noticias internacionales, donde, en los macrodespliegues preventivos u operativos realizados por la policía y el Ejército de países vecinos, absolutamente todos los efectivos aparecen pertrechados con instrumentos de defensa eficaces y armamento adecuado para permitir repeler un ataque terrorista con las mínimas garantías de seguridad".

El SUP considera "ínfima" la inversión en seguridad antiterrorista en relación con países del entorno

Frente a ese escenario, la organización sindical denuncia que muchos agentes españoles no disponen de chaleco antibalas, que sólo hay disponibilidad de cascos de protección en unidades especiales y que las armas largas de uso colectivo son insuficientes y obsoletas. En este punto, recuerda que el modelo de CETME con el que la policía patrulla en centros comerciales y en las estaciones se diseñó en 1952 y el Ejército dejó de usarlo en los años 90.

"Es preciso, por tanto, dotar a nuestros policías de armas largas modernas que, con la suficiente formación, posibiliten afrontar ataques como los de París; de medios de defensa personal imprescindibles, como chalecos y cascos individuales de alta protección; y de armas no letales, como las pistolas eléctricas (taser), con las que poder resolver con la consabida congruencia y oportunidad, amenazas de menor intensidad sin hacer uso de las armas de fuego", añade.

Igualmente, demandan una formación específica sobre protocolos de actuación y coordinación en casos de atentados, una formación general sobre pautas de observación en colectivos de riesgo y una actualización del plan de tiro nacional. "En definitiva, es preciso realizar una inversión que permita dotar a la Policía Nacional de los recursos necesarios adaptados a la problemática terrorista actual, facultando a sus efectivos poder ofrecer el servicio eficaz y de calidad que los ciudadanos y la sociedad española esperan", concluye.

Centros de Extranjeros

También ha sido materia de debate en el encuentro la situación de los CIE, escenarios de continuos incidentes saldados en ocasiones con lesiones a agentes y en los que las organizaciones sindicales denuncian desde hace años déficit de funcionarios. En este contexto, el SUP ha acordado pedir a la Dirección General de la Policía que dote "de forma inmediata" a los agentes destinados en los centros de internamiento de material de protección de uso individual, chalecos anticuchillo, guantes anticorte y pistolas eléctricas, al tiempo que se acondicionen las instalaciones con puertas automáticas para evitar avalanchas en la apertura o cierre de las mismas.

La organización también reclama la instalación de interfonos de audio y vídeo conectados con un centro de control que permita conocer mediante un circuito cerrado de televisión los movimientos de los internos, la convocatoria de plazas para cubrir la "carencia de personal" que se registra en estos centros, el desarrollo de cursos de actualización para mejorar la formación de los policías destinados en estas instalaciones, así como el pago de un complemento retributivo "acorde a la penosidad y peligrosidad del puesto".

Psicólogos contra suicidios

No son las únicas reivindicaciones que trasladarán a la Dirección General de la Policía. El sindicato mayoritario también urgirá medidas para prevenir y reducir la tasa de suicidios en el cuerpo, con diez casos registrados en 2016 y 146 desde el año 2000 (en la mayoría de los casos utilizando el arma reglamentaria).

En este sentido, el SUP reclama la creación de un observatorio del suicidio y bajas psicológicas que permita la investigación y detectar a tiempo posibles casos. Entre otras medidas preventivas, demandan un gabinete psicológico que ofrezca servicio las 24 horas del día, la vigilancia de la salud mental con la creación de las unidades básicas sanitarias, la adaptación del trabajo a la vida familiar, el respeto del descanso entre jornadas y talleres para gestionar el estrés, entre otras.