La CUP de Barcelona ha encontrado un nuevo reto: la expropiación forzosa de la Catedral de Barcelona. Los anticapitalistas propondrán en el Plenario del Distrito de Ciutat Vella de mañana que el Consistorio reclame para sí la propiedad del templo gótico basándose en la reciente sentencia del Tribunal de la Unión Europea que condena a España por las exenciones fiscales a la Iglesia y en el uso turístico que a su juicio da el obispado de Barcelona a la Catedral.

En otras palabras, como se ha convertido en un punto de atracción turística, los anticapitalistas consideran que contribuye a la gentrificación del Barrio Gótico, y proponen ocupar un espacio que aseguran que la Iglesia ya no utiliza como lugar de culto, sino para lucrarse con los turistas. Sin olvidar la inestimable oportunidad de "pasar cuentas" con la Iglesia Católica. Así lo argumenta el conseller de Ciutat Vella de la CUP, Joan Suqué, en twitter.

 

Suqué señala la sentencia del Tribunal de Estrasburgo contra las exenciones del IVA, el IBI y otros impuestos a la Iglesia y concluye que "nos encontramos con que el Ayuntamiento de Barcelona está desobedeciendo al Tribunal de Estrasburgo al no cobrar el IBI y diversos impuestos a esta institución" por eso piden al gobierno local que "sea coherente con el legalismo que dice asumir y empiece por expropiar y socializar forzosamente esta catedral que ahora mismo tiene un uso comercial".

"Esta Iglesia pertenece a las clases populares de Barcelona, añade, "una manera de decrecer naturalmente es cortar el lucro turístico y empezar medidas orientadas al asesoramiento popular" entre las que Suqué destaca la creación de un economato popular o una escuela de música.

Y concluye "si como sociedad nos estamos organizando para declarar nulos los juicios del franquismo también debemos organizarnos para declarar la nulidad de la jurisprudencia franquista, y esta Iglesia Católica se ha posicionado siempre a favor de las clases dominantes, a favor del imperialismo, el racismo y el esclavismo, es hora de pasarle cuentas y hacer justicia histórica".

Lo cierto es que sí se celebran misas, cinco diarias en la capilla del Cristo de Lepanto los días laborables y sewis en el altar mayor los domingos y días de precepto. Pero la CUP denuncia el lucro que obtiene la Iglesia con las entradas de entre 3 y 7 euros por las visitas a espacios delimitados del tempo como el coro o las terrazas.