Madrid es un infierno circulatorio desde primera hora de la mañana de este miércoles. Y sigue siéndolo a última hora de la tarde. La visita a España del máximo dirigente chino, Xi Jinping, está convirtiendo la capital, por momentos, en un lugar intransitable. Durante todo el día se han producido cortes en la M-30 y en los accesos a Madrid, especialmente en la A-6, que han complicado sobremanera la llegada y salida de los trabajadores de la ciudad.

Los cortes de la A-6 han provocado un enorme caos también en el Intercambiador de Moncloa, con los autobuses impedidos para iniciar su marcha y los usuarios agolpados en los espacios de espera del recinto, cuya capacidad ha quedado sobrepasada.

Tampoco los autobuses que llegan a la capital desde el noroeste pueden alcanzar el intercambiador. Son múltiples las denuncias de trayectos de desvíos y de líneas que finalizan su recorrido hasta dos kilómetros más lejos de lo previsto en sus itinerarios oficiales, obligando a los usuarios a cubrir el resto de la distancia andando.

Además, las calles de la capital han sido un constante ir y venir de coches oficiales que han complicado, y siguen complicando, la circulación a intervalos imprevisibles. Los usuarios se quejan de la falta de información, de previsión y de aviso, especialmente en las horas punta.