El líder del PP, Pablo Casado, ha inaugurado esta mañana su nuevo discurso, esto es, "devolver las bolas" que les lance Ciudadanos. Y así se ha despachado a gusto contra Albert Rivera, al que ha acusado "de plagiar nuestro programa de forma hipócrita" y de apropiarse de un 155 que en 2017 quiso limitar a la convocatoria de elecciones en Cataluña.

Rotas las hostilidades, el líder del PP ha aprovechado su presencia en un desayuno informativo de Europa Press donde presentaba a su candidato a la alcaldía de Madrid, José Luis Martínez Almeida, para anunciar que el PP comenzará a "devolver las bolas que, con elegancia" no se devolvieron durante la campaña de las elecciones generales. Ha apelado a aquellos electores que, "quizá, se equivocaron" al confiar en otros partidos "que no han sido leales con ellos, porque lo que querían era ser segundos o terceros frente a nosotros que somos una alternativa de Gobierno" ante un Ejecutivo socialista que, a su juicio, sólo trae "ruina, deuda y desempleo".

Cs: "respiración asistida del PSOE"

Cree que Ciudadanos "no ha descartado esa geometría variable de pactos"  tras el 26-M, ni si acabará siendo, ha agregado, "la respiración asistida en locales y autonómicas y, quién sabe, del gobierno central" de Pedro Sánchez. Es lo que ha calificado de "cordón sanitario selectivo y bipolar".

Casado se ha presentado como el líder de un "PP unido, fuerte, que va con los mejores". Para ello "no nos hace  falta fichar en otros caladeros o no respetar las normas de cortesía apelando al transfuguismo o chaqueterismo" en otra clara andanada contra la política de "fichajes" de Rivera y, muy probablemente, con la mente puesta en el salto del ex presidente de la Comunidad de Madrid Ángel Garrido a las filas naranjas".

Ya en clave interna, apuesta por "ilusionar a la plantilla" y no pararse en si alguien "ha hecho trampas o si el árbitro se ha equivocado" en un símil futbolístico. Mientras los demás "sigan peleándose por ser oposición", en una nueva referencia a la rueda de prensa que ayer ofreció Rivera tras reunirse en Moncloa con Pedro Sánchez, "nosotros trabajamos para ser alternativa" y todo ello "sin bandazos" buscando una "base amplia" a izquierda y derecha.