El líder del PSC, Miquel Iceta, ha revalidado la primera secretaría del partido por el voto unánime de los 1.069 delegados que participan en el XIV congreso de los socialistas catalanes.

El recién reelegido primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha agradecido a la militancia su ratificación en el cargo y ha comenzado el nuevo mandato al frente del partido con un discurso que ha pivotado sobre dos ideas: "Recoser el país" y hacerlo desde la Presidencia de la Generalitat, si consigue ganar las elecciones catalanas; un objetivo que los socialistas ven al alcance.

Lo ha dicho en el discurso que ha realizado en el 14 Congreso del PSC después de que la presidenta del cónclave y del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, hiciera oficial su ratificación tras votarlo los 1.069 delegados por unanimidad.

Así, recién ratificado, Iceta se ha comprometido a "construir un edificio donde quepan todos, recomponer la fractura, recoser el país y proporcionarle un Govern que gobierne para las personas concretas".

Ha dicho sentirse "con la fuerza, la experiencia y con la ilusión de llevar de nuevo al PSC a ser la primera fuerza de Cataluña" y ha definido a los socialistas como los representantes del espacio catalanista no independentista, de centro, y centro izquierda sin renunciar a influir en España y Cataluña.

"Mi sueño es que los socialistas podamos ser útiles a las personas actuando desde la administraciones locales, la Generalitat, el Gobierno y la Comisión Europea", ha expresado el líder socialista.

Ha mostrado su deseo de que más pronto que tarde se culmine el proceso de investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, y ha adelantado que los socialistas catalanes tendrán un asiento en la mesa del Consejo de Ministros.

Tras conseguir asentar el partido y remontar en las urnas de las últimas elecciones -en las municipales, en las generales y en las europeas-, Iceta avisa de que falta un ámbito más, el que emana de las elecciones catalanes, y ha pedido a los socialistas catalanes prepararse para "competir y ganar acuerdos al servicio de los ciudadanos".

Iceta ha agradecido a las bases su apoyo y ha destacado que identificarse como socialista en Cataluña es, "para decirlo claro, un acto de coraje, porque son víctimas de una actitud beligerante que conforma un clima social asfixiante".

Por eso, ha adelantado que una prioridad como secretario será luchar contra esa situación apostando por el "reencuentro entre los catalanes", y retomar consensos e instituciones donde todos se sientan representados.

"Yo no quiero que nadie tenga que esconder o disimular que es socialista, o sus ideas, sean las que sean. No aceptaremos que los intolerantes impongan sus ideas por métodos intimidatorios. No aceptaré que quienes se creen poseedores de la verdad nos impongan su dogma a los demás", ha advertido.

Independentismo

Ha ironizado que "cuando los más radicales dejen de quemar carreteras, animados por Quim Torra", los socialistas seguirán estando ahí, defendiendo a las personas que no tienen quienes les defiendan de los poderosos.

Ha lamentado que los gobiernos de Artur Mas, Carles Puigdemont y el de Torra dejan como herencia un país "dividido y enfrentado, sin un gobierno que se preocupe de gestionar con solvencia" los problemas de los catalanes.

"Libertad por encima de convivencia"

Ha criticado a quienes reivindican la libertad "por encima de la convivencia y no practica ninguna de las dos", y ha asegurado que los socialistas no quieren la independencia sino más y mejor Catalunya.

Así, se ha comprometido a no perder de vista la incertidumbre y la preocupación con la que la sociedad catalana vive el futuro, y a dar seguridad desde la política, aunque reconoce que no hay "solución milagrosa" al conflicto.

"No puedo prometer solución a todos los problemas de Cataluña, pero sí, como presidente de la Generalitat, espero encontrar mecanismos para el diálogo y el pacto con todos los actores", ha dicho y ha reiterado su compromiso con no engañar ni dividir a la sociedad.