Varios meses después de que Borja Prado abandonara la presidencia de Mediaset España, los dueños del grupo han elegido a su sustituta. Será Cristina Garmendia, actual consejera de la compañía y quien fuera ministra de Ciencia e Innovación con José Luis Rodríguez Zapatero como presidente.

Media for Europe (MFE), la matriz italiana de la compañía, se ha tomado un tiempo prudencial para elegir a la máxima representante de su Consejo de Administración.

El nombre de Garmendia sonaba desde hace un tiempo, dada la voluntad de Pier Silvio Berlusconi y su equipo de designar a una mujer con experiencia empresarial para representar a la compañía en España.

Consejera de Caixabank

La dificultad que se había planteado era la relativa a la compatibilidad de sus funciones como consejera en Caixabank, Grupo Logista e Ysios Capital Partner con su puesto de representación en Mediaset.

Finalmente, ha sido designada para ese puesto, si bien el grupo seguirá liderado por Alejandro Salem, su primer ejecutivo en España y quien sustituyó, en 2023, a Paolo Vasile en su puesto.

Garmendia es doctora en Ciencias Biológicas, en especialidad de Genética y atesora un MBA por el IESE Business School de la Universidad de Navarra. Es presidenta de la Fundación COTEC, organización privada sin ánimo de lucro cuya misión es promover la innovación como motor de desarrollo económico y social, y forma parte de diversos consejos asesores como el de Unicef y la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), entre otros.

Trayectoria en Mediaset

Al Consejo de Mediaset se incorporó como consejera independiente en 2017. Actualmente, es miembro de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones; y de la Comisión de Auditoría y Cumplimiento de la sociedad.

Su designación no puede explicarse sin entender los motivos de la caída de Borja Prado como presidente. Fuentes del grupo recuerdan que durante un tiempo fue un hombre de la máxima confianza de los Berlusconi y que, de hecho, fue el elegido para encabezar el proceso de transición que se iba a abrir tras la marcha de Vasile de España.

Sin embargo, su falta de entendimiento con Alejandro Salem provocó que fuera orillado poco a poco de la toma de decisiones hasta que, a finales del año pasado, se decidió su cese.