La famosa aerolínea Ryanair se ha negado a que una mujer suba al vuelo que iba a despalzarla de Sevilla a Valencia por ir subida en una silla de ruedas eléctrica. ¿El motivo? El dispositivo que necesita debido a su ataxia, superaba el espacio permitido para poder ubicarla en bodega, tal y como publica el diario La Vanguardia. La aerolínea informó a la joven que solo podía coger el avión en caso de llevar una silla de ruedas normal y plegable.

Ryanair informa en su página web que “se permite a los clientes viajar con su propia silla de ruedas eléctrica/scooter de movilidad” y limita a dos sillas por vuelo la capacidad de sus aviones. A esto se le suma que, por “razones de seguridad” se limiten a aceptar exclusivamente las sillas “que contengan baterías secas, de gel o de iones de litio”, como es el caso de la valenciana.