El gas butano sigue siendo una opción popular para los hogares, especialmente durante la transición ecológica y la actual crisis energética, que destaca la importancia de ahorrar combustible. Con este objetivo, queremos explicar la duración aproximada de una bombona de butano.

Con una mayor conciencia de ahorro y siguiendo prácticas específicas, puedes lograr notables ahorros en tu consumo.

Es recomendable almacenar las bombonas en posición vertical para mejorar la utilización del interior y conectar una nueva cuando la actual esté agotándose para evitar desperdiciar restos.

Duración de una bombona de butano

La duración de una bombona de butano depende del uso y generalmente se hace referencia a un formato estándar de 12,5 kilos, adecuado para cocinar, climatizar o generar agua caliente sanitaria de manera eficiente y sencilla. Este es el consumo del gas butano según el uso que le vayamos a dar:

  • Cuando se utiliza en climatización, el consumo se acerca a los 100 gramos por hora para maximizar la energía calorífica. Con un uso de cuatro horas al día, la duración aproximada de una bombona de butano en una estufa sería de un mes, aunque en zonas frías podría ser de medio mes debido al uso prolongado.
  • El formato de 12,5 kilos está diseñado para uso en viviendas, ya sea por una o dos personas. En el último caso, duraría alrededor de 24 días. Para familias con tres o más miembros, se recomienda optar por dos bombonas del mismo formato para un rendimiento óptimo durante un mes.
  • La bombona puede usarse para calentar agua durante un mes, incluso si se reserva también para cocinar. Si se usa solo para la ducha, podría durar un mes y medio o hasta dos meses ajustando la temperatura del agua para evitar un agotamiento rápido.
  • Al igual que con la estufa, la calefacción requiere un consumo significativo de gas. Se recomienda no exceder las cuatro o cinco horas diarias, lo que permitiría que la bombona funcione perfectamente durante aproximadamente 20 días.
  • En el caso de cocinar, con un uso menos continuado que la calefacción, la bombona podría durar un mes y medio o incluso dos meses. Se sugiere adquirir tres bombonas de 12,5 kilos para un periodo más prolongado, especialmente si no se utiliza el gas constantemente.
  • Las estufas de llama azul, aunque populares, tienden a tener un consumo energético notable. Con un uso de cinco o seis horas al día, podrían durar unas dos o tres semanas.

Consejos para ahorrar gas butano

Es crucial asegurarse de tener suministro de gas adecuado durante todo el año, especialmente en verano e invierno. Se recomienda realizar pedidos online para recibir el gas a domicilio sin tener que desplazarse. Además, repetir el pedido y acceder a beneficios como gas gratis o descuentos exclusivos está al alcance con solo un clic en la aplicación.

Consejos para ahorrar en el uso de la bombona de butano:

Si la utilizamos para la calefacción:

  • Asegurarse de cerrar la bombona o la llave de suministro cuando no esté en uso.
  • Posicionar estratégicamente las fuentes de calor y evitar fugas de calor por puertas y ventanas.
  • Seleccionar el aparato de calefacción más adecuado para la zona que queremos aclimatar.
  • Mantener una temperatura constante entre 19-21 °C: Prever las pérdidas de calor aislando correctamente los depósitos acumuladores y las tuberías de distribución.

Si la utilizamos para calentar el agua sanitaria:

  • Evitar dejar el agua correr cuando no la estemos utilizando.
  • Prevenir goteos y fugas de grifos.
  • Incorporar reductores de caudal o aireadores en los grifos.
  • Utilizar reguladores de temperatura con termostato.
  • Mantener una temperatura media entre 30 y 35 °C.

Si la empleamos para cocinar:

  • Instalar una cocina acorde a las necesidades del hogar, considerando que a mayor tamaño, mayor consumo.
  • Mantener los quemadores siempre limpios y en perfecto estado para optimizar la eficiencia del calor.
  • Utilizar utensilios de cocina proporcionados al tamaño del quemador para evitar la pérdida de calor.
  • Tapar las cacerolas y ollas mientras cocinamos para prevenir fugas de calor.
  • Controlar eficientemente la temperatura: comenzar con el calor al máximo y reducirlo gradualmente hasta apagar el gas, permitiendo que la cocción se complete con el calor residual.