Bram Van der Wouden, el neerlandés motociclista, ha fallecido este jueves a los 48 años cuando participaba en la quinta etapa del Morocco Desert Challenge 2023 debido a un golpe de calor.
Algunos participantes lo encontraron inerte, tumbado junto a su moto cuando al parecer se había parado a descansar en su quinta etapa.
Aunque los servicios médicos llegaron con rapidez, no pudieron hacer nada por el debutante, que competía en la categoría de malle-moto (sin asistencia), como preparación para poder competir en el Dakar en 2024.
Apenas 48 horas antes, un copiloto perdió la vida también. Laurent Lichtleuchter, el francés de Patrice Garrouste y tres veces ganador del Dakar, murió en la cuarta de esta misma prueba. Su vehículo fue golpeado a gran velocidad (140 km/h) por el de otro participante, que no le había visto cegado por el polvo.
El copiloto sufrió una muerte instantánea, y aunque el vehículo se incendiaba, el piloto pudo salir y salvarse, aunque con algunas quemaduras en las manos y el rostro.
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