Corría el año 2009, y Porsche sorprendía con la presentación de su modelo Porsche Panamera, la primera berlina del fabricante alemán. Pero desde el momento que se tuvieron las primeras noticias del proyecto, sobre las intenciones de la marca de Stuttgart de fabricar una berlina deportiva de cinco puertas capaz de acoger a cuatro pasajeros con la comodidad típica de las berlinas de lujo, se generaron auténticos ríos de tinta por parte de la prensa especializada. Y es que todo lo que se mueve o cuanto acontece alrededor del mundo Porsche suscita mucha expectación.

Expectación que no se ha visto atenuada con el lanzamiento del nuevo Porsche Panamera, la segunda generación del modelo, puesto que es portador de unas tecnologías superlativas encaminadas a hermanar todavía más conceptos, en principio antagonistas, como deportividad extrema y confort de marcha supremo. Hasta tal extremo armoniza, funde  comportamiento dinámico y sensaciones deportivas con comodidad, que posiblemente sea la nueva referencia para sus ilustres rivales.

El nuevo Porsche Panamera responde al concepto de berlina deportiva de gran tamaño (5 m de longitud) con carrocería de cinco puertas y un habitáculo configurado para acoger a cuatro ocupantes en comodísimos asientos individuales. Pero es ante todo un deportivo en el fondo y en la forma, un deportivo en cuerpo y alma. Su silueta recuerda desde el primer vistazo al Porsche por excelencia, el sempiterno 911.Una declaración de principios que realmente le distingue a la vez que le sitúa en una privilegiada posición con respecto a la mayor parte de su competencia.

Como berlina de lujo sus rivales hay que buscarlos entre modelos como, el Mercedes-Benz Clase S, BMW Serie 7 o Audi A8. Ahora bien si se tiene en cuanta su condición de berlina deportiva, entonces la competencia se encuentra en el segmento de los llamados coupés de cuatro puertas, categoría en la que milita, el Mercedes-Benz CLS, el BMW Serie 6 Gran Coupé y el Audi A7, aunque éste último tenga carrocería de cinco puertas.

También pueden considerarse rivales, el Maserati Quattroporte y, sobre todo, el Aston Martin Rapide S. Pero aunque Maserati, al igual que Porsche, siempre ha centrado su producción en los deportivos, vuelven a surgir diferencias de enfoque. El Quattroporte es una berlina deportiva o un deportivo con cuerpo de berlina, mientras que el Panamera es un deportivo de cinco puertas con cuerpo de deportivo. Quizá por filosofía, por apariencia, por concepción,  el Aston Martin Rapide S sea su más directo competidor.

Con un diseño que rezuma puro ADN Porsche, el nuevo Panamera sólo conserva del anterior modelo el concepto

El nuevo Porsche Panamera sólo conserva del anterior modelo el concepto. Con un diseño que rezuma puro ADN Porsche, la longitud de la carrocería se mantiene en 5 m, disminuye ligeramente el voladizo delantero y la batalla se incrementa 3 cm, hasta 2,95 m. Visto desde cualquier perspectiva su parentesco con el 911 está garantizado. El interior rezuma vanguardismo, sofisticación y calidad a partes iguales. Es el vehículo de serie más complejo fabricado por la firma hasta la fecha, puesto que su innovador salpicadero acoge nada menos que cuatro pantallas.

La consola central incorpora un panel táctil que ha permitido prescindir de los tradicionales botones en aras a simplificar el manejo de los distintos sistemas. En el centro del salpicadero destaca la gran pantalla táctil de 12,3 pulgadas que sirve para controlar el sistema multimedia y otras funciones del vehículo. Es configurable por parte del usuario para que éste tenga un cómodo y rápido acceso a las funciones que más utiliza. Con respecto al cuadro de instrumentos presenta en el centro un cuentarrevoluciones analógico flanqueado a izquierda y derecha por sendas pantallas de 7 pulgadas.

Dada su condición de berlina de lujo e incluso de representación, no escatima recursos a la hora de acoger con sobresaliente comodidad a todos sus ocupantes. El Porsche Panamera presenta para ello un habitáculo configurado para acomodar a cuatro personas en asientos individuales. Tanto los asientos delanteros como los traseros poseen ajuste eléctrico, con 18 posiciones para los delanteros y 8 para los traseros. Asimismo los cuatro asientos pueden incluir cinco programas de masaje, calefacción y ventilación. Respecto al maletero ve incrementada su capacidad hasta 495 l, sin olvidar la versatilidad que proporciona el portón trasero de accionamiento eléctrico.

Para aquellos propietarios que gusten viajar en las plazas traseras, dejando la gratificante labor de conducir el vehículo en manos de un chófer, resulta ideal la versión de batalla larga (Executive). Esta versión Executive mide 5,20 m de longitud e incrementa la batalla 15 cm, por lo que pasa de 2,95 m a 3,10 m. De este generoso espacio adicional se benefician los ocupantes de las plazas traseras.

Presume también de ser la berlina de lujo más deportiva del segmento, pero además también añade una gran dosis adicional de confort

El nuevo Porsche Panamera presume también de ser la berlina de lujo más deportiva del segmento, pero además también añade una gran dosis adicional de confort. Unir en perfecto maridaje una deportividad casi extrema con una comodidad que no desentona con la de la mejor berlina de representación requiere algo más que potentes mecánicas y sofisticadas suspensiones. Requiere más bien un sobresaliente trabajo, una refinada puesta a punto del chasis. Precisamente es en este apartado donde se ha puesto toda la carne en el asador para lograr una dinámica de conducción única, máximo confort en los desplazamientos y una gran eficacia. El chasis introduce nuevas suspensiones con subchasis en aluminio para reducir peso en los componentes, frenos de mayor tamaño (opcionalmente cerámicos), llantas de 19 a 21 pulgadas, etcétera.

El sofisticado sistema 4D Chassis Control engloba una serie de elementos cruciales para conseguir esta inigualable dinámica: suspensión neumática con tres cámaras de aire por amortiguador, sistema PASM que regula de forma continua la dureza de los amortiguadores, sistema PDCC Sport de estabilización activa del balanceo y eje trasero direccional. La tecnología de las tres cámaras de aire permite variar la flexibilidad de los muelles neumáticos. Juega con tres constantes elásticas asignadas a cada modo de conducción, pero el sistema conmuta a la rigidez óptima en función de las condiciones de conducción. Con respecto a las barras estabilizadoras activas son accionadas ahora  mediante actuadores eléctricos para ganar en rapidez.

Hay disponibles cuatro programas de conducción: Normal, Sport, Sport Plus  e Individual que actúan sobre los componentes del chasis. El selector de modo, un mando giratorio situado en el volante, permite seleccionar cualquiera de estos cuatro programas. Por añadidura en el centro de dicho mando se ubica, el botón de respuesta deportiva (Sport Response), que al activarlo permite disponer de todo el potencial deportivo del vehículo. Sobre un ordenador central recae la responsabilidad de que todos los componentes trabajen coordinados.

El control Dinámico de Estabilidad (ESP) permite regular su funcionamiento con total independencia del programa seleccionado. Ahora bien todas las bondades sobre el papel de este arsenal tecnológico tienen que demostrarse en la práctica. Y sin lugar a dudas la mejor manera para comprobar su eficacia es ponerlo a prueba en el exigente trazado norte del circuito de Nürburgring. En este escenario fue dónde el chasis del nuevo Porsche Panamera se cubrió de gloria, logrando la versión Turbo  (550 CV) completar el circuito en 7 minutos y 38 segundos, lo que le permitió conseguir un nuevo récord para berlinas en Nürburgring. Esta cifra adquiere más relevancia si se compara con el tiempo invertido (7 minutos y 32 segundos) por el exclusivo Porsche GT (612 CV), que pesa 1.380 kg. Un conjunto muy ligero comparado con los 1.995 kg de peso en vacío del Panamera Turbo.

Anticipa el tráfico que hay hasta 3 kilómetros por delante del vehículo, tomando los datos del sistema de navegación

Como primicia mundial debuta Porsche Innodrive, una especie de copiloto electrónico. Tiene en cuenta el trazado, si hay curvas, pendientes así como los límites de velocidad para optimizar la velocidad del vehículo. El control de velocidad con regulador de distancia utiliza ahora dos sensores de radar. Anticipa el tráfico que hay hasta 3 kilómetros por delante del vehículo, tomando los datos del sistema de navegación que, por supuesto, tiene que estar activado y tener introducida una dirección para sacar el mayor partido a todas sus posibilidades. También cabe mencionar, el asistente de visión nocturna, que a través de una cámara de infrarrojos detecta tanto a personas como a animales de cierto tamaño, enviando una señal de aviso en el salpicadero.

En el apartado de las motorizaciones sólo se conserva de la anterior generación, el motor de gasolina V6 turbo de 3 litros (330 CV) que propulsa a la versión Porsche Panamera, la de acceso a la gama y la única con tracción trasera. Este motor también está disponible en una variante con tracción integral (Panamera 4). El resto de los propulsores son nuevos. En gasolina debuta un V6 biturbo de 2,9 litros (440 CV) que motoriza al modelo 4S, así como un V8 biturbo de 4 litros (550 CV) para propulsar a la versión Turbo que firma una velocidad máxima de 306 km/h. Con respecto al diésel la novedad es la introducción de una nueva mecánica V8 de 4 litros (422 CV) que va instalada en el modelo 4S Diésel.

Dado que alcanza una velocidad máxima de 285 km/h se erige en el diésel más rápido del mercado. Por último, hay una versión híbrida enchufable, la 4 E-Hybrid. Monta dos motores, un V6 de gasolina biturbo de 2,9 litros (330 CV) y uno eléctrico de 136 CV que desarrollan una potencia conjunta de 462 CV. Su autonomía en modo eléctrico es de 50 km, pudiendo alcanzar en dicho modo una velocidad máxima de 140 km/h. Pero con los dos propulsores empujando a pleno rendimiento es capaz de alcanzar los 278 km/h. Salvo la versión de acceso, toda la gama cuenta con tracción total activa. También todos los modelos llevan acoplado un cambio automático PDK de doble embrague con 8 velocidades. La gama está compuesta por 10 versiones, estando disponibles con la carrocería larga (Executive) todos los modelos salvo el diésel. Los precios oscilan entre 99.674 euros (Panamera) y 191.859 euros (Turbo Executive).