El humorista malagueño Chiquito de la Calzada, de 85 años, ha fallecido hoy en el Hospital Regional de Málaga donde ingresó a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) al sufrir una infección que le ha provocado un deterioro hemodinámico. Chiquito de la Calzada había sufrido una angina de pecho que motivó hace dos semanas su ingreso en el Hospital Regional de Málaga, donde ya había estado hospitalizado tres días tras sufrir una caída en su vivienda el 14 de octubre.

El artista, cuyo nombre real es Gregorio Esteban Sánchez Fernández, nació en 1932 en el barrio de la Trinidad, en Málaga, en el lugar conocido como Calzada de la Trinidad. Su origen y el hecho de que se entregara desde muy niño al flamenco le dio el nombre artístico de Chiquito de la Calzada. Una carrera que discurrió discreta durante décadas por escenarios de todos de toda España y de Japón donde se fue a vivir para vivir de su arte.
Pero el Chiquito de la Calzada que conocemos todos nació en Antena 3 televisión en el programa de chistes Genio y Figura de Tomás Summers el verano de 1994.

Chiquito de la Calzada.

Aquel verano, entre chiste y chiste y la desconcertante presencia televisiva en los 90 de las Mama Chicho, su anómalo humor se hizo extremadamente popular. Sus expresiones jarl, no puedoor, fistro, cobarde y torpedo de la pradera se introdujeron en el lenguaje  y en el repertorio humorístico del país hasta la extenuación. Durante más de una década el malagueño se resarció de mala suerte anterior y recorrió todos los platós de televisión. Y protagonizó varias películas que aprovecharon su popularidad para hacer algo de caja en taquilla. Aquí llega Condemor, el pecador de la pradera (1996) fue su primer papel protagonista, al que siguieron Brácula, Condemor II (1997) y Papá Piquillo (1998).

No había comida de empresa, recreo de colegio, reunión de negocios y, probablemente algún Consejo de Ministros, sin que alguien usara un jarl o un no puedor.

Hasta el rey emérito se acercó un día a Chiquito de la Calzada. "Llegó como imitándome, moviéndose y hablando lo mismo que yo cuando actúo", le contó el malagueño al cronista del corazón Tico Medina. Y es que el surrealista humor de Chiquito de la Calzada era contagioso y no entendía de clase social, ni de nivel cultural. Hoy sigue siendo carne de memes virales en internet. Con las claves de Chiquito se puede explicar desde el ascenso de Trump al poder o la crisis de Cataluña, porque desde el advenimiento de Chiquito de la Calzada siempre habrá un torpedo de la pradera al que acusarle de ser un fistro pecador. Está la cosa muy mala Chiquito.