Muchos de los antiguos mercados de abastos se han reinventado en paraísos gastronómicos que podemos encontrar prácticamente en todos los barrios de Madrid. Amplios espacios populares en los que la venta de productos frescos convive con una activa y novedosa experiencia culinaria y un nuevo concepto de ocio. En los mercados gastronómicos podremos encontrar variedad, calidad y originalidad: desde productos gourmet y sabores de todas las partes del mundo a propuestas de calidad tradicionales y hasta las últimas tendencias gastronómicas.

Mercado de San Ildefonso (Calle Fuencarral, 57)

Entre sus 20 puestos, dos terrazas y tres barras repartidos en tres plantas, se puede encontrar una completa oferta gastronómica. Empezando en la planta de la calle, en Ildefonso San y en Akma encontrarán una oferta de cocina asiática con toques madrileños. En la primera planta podrán escoger entre una variedad de espacios para tomar pinchos y tapas o degustar la cocina peruana en Jaleo y las tradicionales arepas venezolanas en La Arepera. Para postre, no dejen de probar las crepes (también las tienen saladas) de Cultura Café acompañada por un café de cualquiera de las variedades que importan desde todas las partes del mundo.

Mercado de San Ildefonso

Mercado de la Paz (Calle Ayala, 28)

En el barrio de Salamanca encontramos el que probablemente sea el mercado más sofisticado de la ciudad. Desde fuera apenas se aprecia, pero una vez dentro nos espera una amplia oferta de tiendas con un elevado perfil gourmet. Aquí es muy fácil encontrar género de lo más exquisito y puestos de comida de diversas cocinas internacionales, en los que degustar alguna que otra delicatesen. Para comer algo rápido recomendamos los sándwiches artesanos de Magasand y para cocina española, la tortilla de patatas de Casa Dani y los arroces de Bar Cebreros. La opción japonesa está presente en Tatako, la italiana de Matteo Cucina y la cocina latinoamericana con el venezolano LA Despensa by Antojos Araguaney y el mexicano Doce Chiles.

Mercado de la Paz

Mercado de San Miguel (Plaza de San Miguel, s/n)

El Mercado de San Miguel, junto a la Plaza Mayor, fue el primer mercado gastronómico de Madrid y es una visita indispensable. Podemos comenzar el recorrido con una doble malta abadía en Beer House, con alguno de los muchos vermús que ofrece La Hora del Vermut, o si lo que busca es un buen vino, no defraudará el Pinkleton&Wine o The Sherry Corner donde se puede pedir una bandeja de degustación con seis vinos. La visita continúa con sabrosos bocados: Ostras Daniel Sorlut es un buen sitio para tomar algo ligero, en Carrasco Guijuelo un buen jamón, para unos canapés Carro Caviar, y para croquetas de varios sabores Carro de Croquetas. En la versión para tomar o llevar del mítico Lhardy pueden encontrar elaboradas tapas y raciones y, en el Carro del Señor Martín, se pueden probar un estupendo bocata de calamares y los tradicionales cartuchitos y papelones con una buena fritura de pescado.

Mercado de San Miguel

Mercado de Antón Martín (Calle Santa Isabel, 5)

Situado en pleno centro de la ciudad es, sin dudad, el mercado más polifacético de todos. No solo por el gran número de actividades y eventos que allí se desarrollan, sino también por la cantidad y procedencia de la oferta gastronómica de la que dispone. En total, más de veinte puestos con un trato cercano y un buen producto. En Benito Aperitivos ofrecen vinos italianos y auténtica comida siciliana y en la Fiaschetteria La Saletta tienen buenas pizzas y porchetta. En Buns & Bones sabrosa streetfood, cocina casera en Caracola, ceviches en El Mono de la Pila y comida taiwanesa en Casa Bora. En El Tarantín de Lucía encontraremos ostras, ahumados y otros productos frescos del mar, dulces en Majo's Food, y sushi barato -hecho al momento- en Yokaloka.

Mercado de Antón Martín

Mercado de Vallehermoso (Calle Vallehermoso, 36)

Este mercado de gran personalidad consta de dos plantas en las que, además de encontrar productos de primera categoría, se pueden degustar platos de todas las partes del mundo. Una buena idea para empezar es tomar el vermú en Vermut y Amén, y continuar con alguna propuesta de cocina fusión oriental en Tripea o en Kitchen 154, o cocina japonesa en Washoku, elaborada con productos del mismo mercado.

Mercado de Vallehermoso