La utilización, cada vez más extendida, de emoticonos y emojis en diversos tipos de textos plantea a menudo dudas sobre su colocación en las frases, su relación con el resto de los elementos de una oración, la puntuación…

Conviene aclarar que, en rigor, emoticonos y emojis son distintos. Los emoticonos son los símbolos creados con signos de puntuación y que suelen leerse inclinando la cabeza: 🙂 , 😉 o 🙁 . En cambio, los emojis son caracteres Unicode que se muestran como pequeñas figuras, generalmente en color, con valor simbólico. Pese a esa distinción original, en el uso general es frecuente y aceptable utilizar la palabra “emoticón” o “emoticono” para referirse a todos esos símbolos.

Muy extendidos en determinados ámbitos, conviene reservarlos a situaciones en las que aporten información o emociones que no son fáciles ni rápidas de expresar por otros medios, señala la Fundación del Español Urgente, promovida por la Agencia Efe y BBVA.

A continuación se ofrecen algunas indicaciones sobre su empleo en textos generales extraídas del “Libro de estilo de la lengua española”, de la RAE, primera obra académica en la que se aborda este asunto y en cuyo capítulo sobre escritura digital, al que pertenecen estos consejos, participó como consultor especial el presidente de la Fundéu BBVA, Mario Tascón.

La citada obra recomienda reservarlos para la escritura informal y procurar que no empobrezcan el uso de la lengua. Por otro lado, aclara que es preciso asegurarse de que el receptor los interpreta adecuadamente, ya que, si bien hay algunos aparentemente universales, el uso de otros conlleva cierto riesgo de imprecisión o de incomprensión.

1. Espacios

- Se recomienda escribir los emoticonos y los emojis separados por un espacio de las palabras y pegados o no a los grupos de puntuación en iguales condiciones que una palabra, a excepción de que estos sustituyan fragmentos de términos.

- En cambio, los emoticonos se escriben entre espacios siempre que se considere que puede haber problemas en su delimitación. Cuando aparezcan junto a signos de puntuación que se podrían tomar como parte del emoticono, se puede dejar un espacio entre ambos «(Nos vemos 🙂 ).» o cambiar el emoticono de lugar.

2. Puntos y comas

- Por lo general, se recomienda respetar la puntuación que el enunciado tendría si no se utilizaran emoticonos o emojis.

- En el caso del punto final solo se justifica su ausencia cuando el emoji se utilice para representar el punto. Esto también se aplica a signos de interrogación y exclamación.

- Cuando se escriben varios emojis o emoticonos seguidos, no es necesario separarlos por comas, excepto si se usan en sustitución de palabras.

3. ¿Antes o después del signo de puntuación?

Cuando se inserta un emoticono o emoji hay que procurar que su posición no genere ambigüedades respecto a cuál es el segmento o elemento al que afectan. Se pueden dar cuatro situaciones diferentes:

- En los casos en los que un emoji o un emoticono afecten a todo un enunciado y este sea el único de un mensaje, es preferible colocarlos después del punto para evitar que se pueda interpretar que solo modifican a la última parte. Pese a ello, el Libro de estilo del español señala que no es incorrecto colocarlo antes.

- Cuando hay otro enunciado después de aquel al que modifican, es preferible situar el emoji o emoticono delante del punto para que no parezca que afectan al enunciado siguiente.

- Si el emoji o el emoticono modifican a la última parte de un enunciado, se aconseja escribirlos delante del punto.

- Cuando el emoji o el emoticono sustituyen a una pieza léxica, la puntuación se situará donde correspondería si fueran palabras.

4. ¿Y las mayúsculas?

Salvo que los emojis o los emoticonos se usen en sustitución de palabras, la mayúscula debe aplicarse como si no estuvieran presentes. Así, en un enunciado encabezado por un emoji o un emoticono, la primera palabra tras ellos debe mantener la mayúscula inicial («🏀 Resultados de la liga de baloncesto:…»).

En la web de la Fundéu puede consultarse una versión de esta misma recomendación con ejemplos reales de uso de emoticonos y emojis.

La Fundéu BBVA (www.fundeu.es), que trabaja asesorada por la Real Academia Española y cuyo principal objetivo es el buen uso del español en los medios de comunicación, cuenta con la colaboración, además, del Instituto Cervantes, la Fundación San Millán, Accenture y Prodigioso Volcán.