Aunque, siendo sinceros, la segunda temporada de Los Bridgerton no es, ni de lejos, tan buena como la primera (se ha echado especialmente de menos al duque de Hastings), la audiencia ha acudido entusiásticamente a las pantallas y la familia Bridgerton ha vuelto a romper todos los récords. Ya es, oficialmente, la serie de habla inglesa más vista de la historia del gigante de streaming. Y hay más: a la espera de que se ruede una nueva temporada, ya se ha hecho público que la saga tendrá su propia spinoff. O, más bien, una precuela. Sí, queridos fans de Bridgerton, habrá una serie íntegra dedicada a la reina Charlotte.

Todas las alertas sonaron cuando la actriz Golda Rosheuvel, que da vida a la monarca, fue vista en Londres montada en un carruaje antiguo y vestida íntegramente de negro, muy alejada de los chispeantes colores y las aparatosas pelucas que suele lucir en los Bridgerton. Aquello hizo pensar que, o bien había un giro en el guión que nadie esperaba, o había nueva serie en el horno. La propia productora Shonda Rhimes se encargó de zanjar los rumores: el día 30 de marzo, hacía público en Instagram la imagen de un guion. "Prepare for The Queen's return", "preparaos para el regreso de la reina", decía escuetamente.

Oficialmente, la serie aún no tiene título propio, pero ya se sabe que el director será Tom Verica, el mismo que el de los Bridgerton. También se sabe que versará sobre la vida de la reina Charlotte y, sobre todo, en todo lo que tuvo que sufrir hasta llegar al trono (como consorte).

La verdadera historia de Charlotte de Mecklenburg-Strelitz

Recordemos que, a pesar de que en su momento algunos criticaron que una mujer negra fuera la escogida para representar a una reina de Inglaterra en los Bridgerton, en realidad sí hubo una reina birracial: se llamaba Charlotte de Mecklenburg-Strelitz y, sí, se casó con Jorge III.

La Charlotte de verdad nació el 19 de mayo de 1744 en un pequeño ducado del norte de Alemania (entonces Alemania como tal no existía, aún estamos hablando de los tiempos del Sacro Imperio Romano). Su padre era el duque Carlos Luis Federico de Mecklenburgo; su madre, la princesa Elisabeth Albertina de Saxe-Hildburghausen. Por los retratos que se conservan de ella sabemos que, aunque no era negra, sí tenía la tez muy morena. En realidad, descendía de africanos: Charlotte estaba emparentada con una rama de la familia real de Portugal que venía de Margarita de Castro e Souza, la cual descendía de Alfonso III y su concubina, Madragana, que era negra.

Charlotte llegó a Inglaterra con tan sólo 17 años para desposarse con un hombre, el rey Jorge III, al que nunca había visto en persona. En realidad, su desconocimiento de la historia y, sobre todo, la política inglesa (ni siquiera hablaba inglés) fue lo que más pesó para escogerla como novia: Jorge III pensó que Charlotte no estaría interesada en intrigas políticas ni que querría ostentar ningún poder.

Pero una vez se instaló en Inglaterra, las turbulencias políticas, las numerosas guerras y, sobre todo, la enfermedad mental de Jorge III hicieron que a Charlotte no le quedara más remedio que hacerse con las riendas. Aquellos eran los tiempos de la Guerra de la Independencia Americana, cuando Inglaterra perdió el control de sus colonias. También eran los tiempos de las guerras napoleónicas (en 1815, los ingleses ganaron a Napoleón en la famosa batalla de Waterloo, un hito que todo inglés de pro recuerda con orgullo). Como Jorge III era incapaz de reinar (durante años se le apodó "el rey loco", aunque lo más probable es que sufriera un trastorno bipolar), el año 1811 es estableció un regencia: el hijo mayor de Charlotte y Jorge, el príncipe de Gales, ejerció de regente hasta la muerte de su padre en 1820.

A pesar de que en los Bridgerton aparece como la única al frente de la monarquía, la verdad fue un poco más compleja: su hijo gobernaba y ella se dedicaba a hacer obras de caridad, impulsar la carrera de músicos (se interesó por un jovencísimo compositor llamado Mozart) y, sobre todo, a la decoración y la jardinería. Fue ella quien impulsó multitud de jardines de Kew y quien mandó construir Frogmore House, una preciosa mansión cerca del castillo de Windsor. Quizás lo más importante, Charlotte fundó un montón de orfanatos, ayudó a impulsar un hospital para embarazadas y fomentó la educación en mujeres. Charlotte murió el 17 de noviembre de 1818 en el palacio de Kew.