En la madrugada del 18 de marzo de 1976, seis días antes del golpe militar liderado por el general Videla en las últimas bocanadas del régimen de Isabel Perón, como parte del Plan Cóndor; el pianista brasileño Francisco Tenório Cerqueira Junior, nacido en Río de Janeiro y conocido por sus allegados como Tenorinho; desapareció en la ciudad de Buenos Aires.

Tenía 35 años y era por entonces uno de los más brillantes instrumentistas de la música brasileña. Ocurrió justo después de que actuara en el Teatro Gran Rex junto a Vinicius de Moraes y Toquinho.

Las últimas personas que lo vieron fueron sus compañeros de profesión, que aseguraron que sobre las 03:00 horas de la madrugada Tenório J. bajó del hotel Normandie, donde se alojaba toda la banda de Vinicius, y se dirigió a comprar cigarrillos, aunque otras versiones apuntan a un bocadillo. Nunca más regresó.

"Aquí se hospedó este brillante músico brasileño, víctima de la dictadura militar argentina", reza una placa en el hotel. Cerqueira fue uno de los 11 brasileños secuestrados en Argentina durante la dictadura. Una de las personas que más luchó por encontrarle fue el propio Vinicius de Moraes.

La desaparición de Tenório sumió en la perplejidad tanto a su entorno como a los músicos brasileños, quienes pensaron que tarde o temprano el músico regresaría, puesto que no se le conocía militancia política. Cuando desapareció, el músico era pareja de Carmen Cerqueira, que estaba embarazada y con la que ya tenía otros cuatro hijos.

Décadas después del suceso, un periodista estadounidense que investigaba el impacto de los ritmos brasileños en el resto del mundo y su vigencia para The New Yorker, se encontró con la historia de Tenório Junior y, cautivado por el misterio de su desaparición, termina enfocando su trabajo en averiguar qué ocurrió con él.

Este es el punto de partida de Dispararon al pianista, película ya disponible en los cines tras pasar por el Festival Internacional de San Sebastián, el de Telluride y en el de Toronto.

A lo largo de su 1 hora 43 minutos de duración, se ve cómo Jeff Harris se obsesiona según avanzan sus averiguaciones y entrevistas a la vez que la presencia de la política va aumentando en la narración, aunque se mantiene siempre por debajo de la historia musical.

Esta cuenta con sonidos de João Gilberto, Caetano Veloso, Milton Nascimento, Gilberto Gil, Paulo Moura, Mutinho y Aretha Franklin, Tom Jobim, Baden Powell, Sergio Mendes y Luiz Eça, entre otros.

Guiada por la voz de Jeff Goldblum, Dispararon al pianista ha sido dirigida por Fernando Trueba (ganador de un Oscar por Belle Epoque) y Javier Mariscal, quienes ya hicieron tándem en la premiada Chico y Rita, estrenada en 2010.

El nombre de la película es un homenaje a otra: Tirez sur le pianiste, estrenada en 1960 y dirigida por François Truffaut basada en la novela Down There de David Goodis. La película destaca por su plástica animación firmada por Javier Mariscal, muy similar al formato de un cómic.

Sumado a la música, esto hace que sea una película cálida y colorida pese al suceso que la origina, que la convierte progresivamente del musical inicial a un thriller. Sin embargo, su estructura a base de las infinitas entrevistas que hace el periodista y algún flashback dentro de la misma, pese a conseguir ser coherente, hace en ocasiones que el visionado sea denso y lento.