Iberdrola ha sido la última gran compañía energética en presentar sus resultados empresariales pertenecientes a 2021, un año tremendamente marcado por los precios de las materias primas. Las perspectivas de los analistas situaban los beneficios en una horquilla de 3.700 millones y 4.000 y la empresa liderada por Sánchez Galán ha cumplido con las expectativas ya que ha obtenido unas ganancias de 3.885 millones de euros, un 8% más que el año 2020, según ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Pero los beneficios podrían haber sido "más amplios" si dos regiones tan importantes para Iberdrola como España o Reino Unido no hubieran tenido tensionados el mercado energético. "El positivo crecimiento en Estados Unidos y Brasil ha compensado el negativo comportamiento del negocio de generación y clientes, afectado por los altos precios de la energía en España y Reino Unido", recoge la empresa en su memoria anual.

En este mismo sentido, la empresa subraya que de no haber mantenido la política de precios fijos a sus clientes este beneficio se hubiera incrementado sustancialmente.

Iberdrola, impulsada por los mayores beneficios, también ha decidido elevar el dividendo un 5% de cara al próximo año por lo que ofrecerá a sus accionistas de 044 euros. Además, el Consejo de Administración propondrá en Junta de Accionistas la aprobación de un reparto de dividendo complementario, de 0,27 euros por acción, que se sumarán a los 0,17 euros por título abonados en concepto de dividendo a cuenta en febrero.

La liquidez alcanza los 19.500 millones de euros, que cubren las necesidades de financiación de 24 meses, y la compañía demostró su capacidad de acceso a los mercados. En un contexto inflacionista, la compañía cuenta con el 80% de su deuda financiada a tipo fijo y una vida media superior a los 6 años.

Las inversiones se incrementan hasta los 9.940 millones. Según explica la empresa, el 90% se ha destinado al desarrollo de nueva capacidad renovable y a redes inteligentes. Iberdrola remarca que Estados Unidos y España han vuelto a ser sus dos grandes mercados.

 “La aceleración de las inversiones nos permite crecer a un ritmo superior al previsto. Estos resultados reflejan el éxito de un modelo sostenible y nos animan a seguir trabajando hacia la descarbonización del planeta”, señala Ignacio Sánchez Galán en el comunicado.