La inercia del sistema eléctrico español instantes antes del apagón ocurrido el pasado 28 de abril era el "recomendado". Así lo ha asegurado la ministra de Transicion ecológica y vicepresidenta tercera, Sara Aagesen. Durante su comparecencia ante el Pleno del Senado, la ministra ha apuntado que según las investigaciones de Red Eléctrica, el sistema eléctrico peninsular registraba unos niveles de inercia -necesaria para absorber posibles perturbaciones de tensión y mantener la frecuencia- dentro de los recomendados por Entso-E, la red de operadores europeos. Según ha apuntado Aagesen, Entso-E plantea un objetivo de 2 segundos y según las estimaciones realizadas por REE "momentos previos a ese cero se estima que el sistema eléctrico peninsular te4ndría un nivel de inercia acorde a esas recomendaciones". Un nivel que según ha apuntado después se sitúa en los 2,3 segundos.

En su relato de lo que hasta ahora se conoce, Aagesen ha situado como posible causa "una situación de sobretensionamiento" en la red y no se detectan indicios de un ciberataque. Sí ha avanzado que en un plazo de tres meses se podrá presentar un informe detallado sobre las causas que originaron el apagón.

En su relato de hechos ha destacado que se investiga otros incidentes previos que se han detectado anteriores al día 28 por si pudieran tener alguna incidencia. Respecto al lunes 28, sí ha asegurado que se ha podido comprobar dos oscilaciones significativas en la tensión de la red, que en situaciones ordinarias es de 50 hertzios. En concreto, la primera de ellas se detecta a las 12.03 horas, media hora antes del apagón. En ella se produce una oscilación de 0,6 hertzios (Hz), alteración que Aagesen ha calificado de "anómala" y cuya causa aún se desconoce. Minutos después, a las 12.19 se detecta otra alteración de frecuencia, de 0,2 hertzios, que se considera "habitual": "El sistema lleva a cabo medidas para amortiguar la oscilación y seguimos analizando si estas dos oscilaciones pudieron tener relación o no con lo que ocurrió media hora más tarde", ha reiterado.

En su detallado relato ha continuado apuntando que a las 12.30 horas, tres minutos antes del apagón, se produjeron tres eventos de pérdida de generación por una potencia de 2,2 GW detectadas en Granada, Badajoz y Sevilla. Estas alteraciones se sucedieron en un periodo de apenas veinte segundos, entre las 12:32.57 y las 12:33.17 que provocaron una sobretensión en el sistema eléctrico peninsular. Las razones que lo provocaron se siguen investigando. Es a partir de ese instante cuando se producen una serie de desconexiones del sistema en cascada por el equivalente a 15 GW de potencia. La mayor parte, 10 GW, procedían de operaciones de deslastre y los 5 GW restantes de las interconexiones con Francia y Portugal. Esta circunstancia precipitó la pérdida de la sincronía de la red y y el sistema eléctrico queda aislado.