Un conato de incendio forestal en la zona de Cabo Tiñoso, en Cartagena (Murcia), ha puesto en alerta a las autoridades y ha reavivado la preocupación por la seguridad ambiental en uno de los enclaves naturales más valiosos de la Región de Murcia.

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El suceso, que tuvo lugar en la noche del jueves, fue rápidamente controlado gracias a la rápida intervención de los servicios de emergencia, pero ha abierto una investigación para esclarecer sus causas, según informa Europa Press.

El Centro de Coordinación de Emergencias 112 recibió varias llamadas de alerta a las 22:31 horas, informando de la presencia de llamas en el monte, muy cerca de la batería de Castillitos, un conocido punto de interés histórico y turístico en la zona. Testigos presenciales indicaron que, momentos antes de iniciarse el fuego, observaron el lanzamiento de pirotecnia desde un vehículo que posteriormente se dio a la fuga, lo que ha llevado a las fuerzas de seguridad a centrar sus pesquisas en esta posible causa.

El operativo desplegado, adscrito al Plan Infomur —el plan regional de lucha contra incendios forestales—, incluyó la movilización de agentes medioambientales, bomberos del Servicio de Extinción de Incendios, Salvamento y Protección Civil del Ayuntamiento de Cartagena, técnicos de la Dirección General de Patrimonio Natural y Acción Climática, dos brigadas forestales, así como patrullas de la Policía Local y la Guardia Civil. 

Gracias a la rápida actuación, el incendio fue dado por controlado a las 23:51 horas y completamente extinguido pasadas las 2:00 de la madrugada, afectando únicamente a unos 150 metros cuadrados de pinar, lo que lo clasifica como un conato de incendio.

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han abierto una investigación para determinar las causas exactas del incendio. La principal hipótesis apunta al uso imprudente de material pirotécnico, una práctica prohibida en zonas forestales especialmente en época de alto riesgo, como la actual.

Las autoridades recuerdan que la Región de Murcia cuenta con el Plan Infomur, que establece protocolos estrictos para la prevención y actuación ante incendios forestales, y que la colaboración ciudadana es fundamental para evitar tragedias mayores.

Este incidente subraya la vulnerabilidad de los espacios naturales ante conductas irresponsables y la necesidad de extremar las precauciones, especialmente en periodos de altas temperaturas y baja humedad, condiciones que incrementan el riesgo de incendios forestales en la región. 

Las autoridades insisten en la importancia de denunciar cualquier actividad sospechosa y respetar las restricciones vigentes para proteger el patrimonio natural de todos.

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