En el arte de caer y levantarse no hay otro como Rafael Nadal. Mil veces se ha caído y mil veces se ha levantado. La última hazaña la acaba de escribir en Melbourne ganando el Abierto de Australia con más de 35 años tras superar la enésima lesión en el pie. No es ni mucho menos un Grand Slam más en su palmarés: es un título, el número 90 de su carrera, que le abre las puertas del cielo. Un hito que ha conseguido, además, batiendo otro récord; y es que nunca había levantado un major remontando después de perder los dos primeros sets: el perfecto inicio de temporada para afrontar el año con motivación.

El 2-6, 6-7, 6-4, 6-4 y 7-5 sobre el ruso Daniil Medvedev en la final de Australia le coloca como el jugador con más títulos Grand Slam de la historia del tenis. Son 21 copas, una más que Novak Djokovic y Roger Federer, con quienes mantiene una pugna fabulosa por ser el mejor de todos los tiempos. En el palmarés del español hay ya 13 Roland Garros, cuatro US Open, dos Wimbledon y dos Abiertos de Australia, lo que le convierte en el cuarto tenista que gana al menos dos veces cada grande tras el propio Djokovic y los australianos Roy Emerson y Rod Laver.

En la lista masculina ya no tiene a nadie por delante, aunque todavía hay tres mujeres con más títulos individuales de Grand Slam. La australiana Margaret Court ganó 24, la estadounidense Serena Williams tiene 23 de momento, mientras que la alemana Steffi Graf sumó 22 en su carrera.

Ver a Nadal con el trofeo australiano era prácticamente imposible de imaginar hace unos pocos meses. Tras caer en junio de 2021 en las semifinales de Roland Garros, el español se perdió Wimbledon y los Juegos Olímpicos de Tokio y quiso regresar para la gira norteamericana. Pero una lesión en el pie que le persigue desde 2005 le obligó a poner fin a la temporada en agosto. Una vez más, el futuro de Nadal quedaba entre interrogantes por culpa de los problemas físicos.

"Mi felicidad no depende de superar a Federer y Djokovic"

Por si fuera poco, Djokovic iba como un tiro: se llevó tres de los cuatro grandes en 2021 y llegó a Australia dispuesto a superar por fin a sus dos históricos rivales. Con Federer ausente por lesión y Nadal sin ritmo de competición y habiendo padecido el coronavirus en diciembre, era el momento de Nole. Pero su trifulca con las autoridades australianas y su negativa a vacunarse acabaron en una deportación y ahora es su futuro el que tiene los nubarrones. A Nadal, en cambio, se le abre el cielo, por mucho que él siempre insista en que no hace caso a esas estadísticas.

“Yo simplemente vivo mi día a día. No vivo con esa angustia para querer ser yo el que tiene más Grand Slam. Al fin y al cabo, los tres hemos superado nuestras expectativas”, dijo durante el torneo en Australia. "No creo que mi futuro dependa de si termino ganando un Grand Slam más que Novak o que Roger. No creo que la felicidad de mi futuro en ningún caso dependa de ello”.

Lo cierto es que Federer lleva siete meses sin competir por una lesión de rodilla y a sus 40 años parece ya caminar hacia el ocaso. Su último Grand Slam lo ganó en Australia 2018, hace ya cuatro años. Djokovic, por su parte, tiene todavía mucha cuerda: con 34 años vive uno de los mejores momentos de su carrera, pero la decisión de no vacunarse le puede costar mucho en la pelea del Big Three. O cambia de decisión o este año se perderá Roland Garros y US Open. Y a estas alturas cada oportunidad es un tesoro.

Ganando Grand Slam con más de 35 años

Australia ha sido siempre el Grand Slam que más ha maltratado a Nadal. Ganó la primera final que disputó en Melbourne, en 2009 ante Roger Federer, pero perdió después las de 2012, 2014, 2017 y 2019. Además, se tuvo que retirar en dos ediciones por sendas lesiones. Con el título conquistado hoy se sitúa además como uno de los veteranos con mejor palmarés.

Su segundo Grand Slam en Australia le convierte en el tercer tenista que gana el Open después de cumplir 35 años. Nadal ha conquistado el título con 35 años y 241 días y el récord lo tiene Ken Rosewall, que levantó la copa en 1972 con 37 años y 62 días. Roger Federer es el otro jugador que ha triunfado en Australia pasados los 35.

Hay otro dato que refleja lo bien que le están sentando los años a Nadal. A pesar de que cada vez juega menos torneos y selecciona bien el calendario, el español ha ganado ya siete grandes después de cumplir los 30 años, una estadística en la que únicamente le supera Djokovic con ocho.