Un grupo de trabajo de la ingeniería pública Ineco opera ya en la elaboración de un estudio informativo para conectar Madrid con Santander por AVE. Se trata de una encomienda que procede directamente del ministro de Fomento Íñigo de la Serna, natural de Santander y alcalde desde 2007 hasta que fue nombrado ministro el 4 de noviembre pasado.

El equipo de Ineco ha recibido estos días el encargo de analizar la viabilidad de la alta velocidad entre Palencia (adonde el AVE llega desde septiembre de 2015) y la capital cántabra, un viejo proyecto reiteradamente descartado por Fomento en los últimos años. El presidente regional, Miguel Ángel Revilla, ha reclamado en los últimos días al Gobierno central que la alta velocidad llegue a Santander "antes que a Bilbao y a Gijón".

Dos alternativas

La intención de De la Serna fue desvelada a principios de este mes de diciembre por El Confidencial, aunque entonces era una idea aún por concretar. Ineco espera entregar sus conclusiones en febrero, por lo que el sanedrín asignado para el estudio trabaja a contrarreloj. "Un estudio no quiere decir que se vaya a licitar el AVE", aseguran en Fomento. "Pero es una hoja de ruta que puede guardarse indefinidamente y que sale mucho más barato que ejecutar obras".

Los técnicos de la ingeniería revisan un antiguo proyecto de alta velocidad Madrid-Santander que data aproximadamente del año 2000. El primer capítulo que aborda el grupo de trabajo de Ineco es la conexión de Palencia con Alto Campoo, antes de Reinosa. Hay dos alternativas: una en cada margen del río Pisuerga, que discurriría en paralelo a la vía del AVE.

Evitar otro Pajares

Fuentes de Renfe y Adif avanzan que las mejores perspectivas pasan por mejorar la línea Palencia-Reinosa, donde la alta velocidad puede desarrollarse de manera más cómoda al ser éste un terreno menos accidentado. Y que no necesariamente los trenes comerciales deben ser AVE, sino los actuales Alvia mejorando la rapidez hasta los 200 kilómetros por hora, e incluso algo más.  "Hay veces que perder escasos minutos supone un ahorro estratosférico", señalan conocedores del AVE cántabro.

"A partir de Reinosa entramos en la Comarca de Campoo-Los Valles, que es muy abrupta, y tratar de salvar la montaña como se ha hecho en Asturias con la variante de Pajares", que lleva desde 2005 en obras y en la que se han invertido 3.300 millones de euros. "La otra opción es hacer como la Y vasca" cuyas obras están a la mitad, dicen en Adif; "es decir, túneles y viaductos sucesivamente".

El proyecto de Tren de Alta Velocidad (TAV) vasco se aprobó hace casi 30 años, en 1989. Y Pajares no abrirá antes de 2018. De la Serna se comprometió recientemente con el presidente de Asturias y de la gestora del PSOE, Javier Fernández, a que los trenes empezaran a circular por la variante astur-leonesa en diciembre de 2017. Dos retrasos que van a marcar la llegada del AVE a Santander, si es que finalmente se produce.