El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha vuelto a desoír las recomendaciones de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), el organismo que actúa como auditor de la Administración.

Exigirá el cumplimiento del mismo objetivo de déficit público del 0,6% del PIB a todas las comunidades autónomas en 2017, en lugar de establecer límites diferenciados en función de su situación financiera de partida, como viene demandando la organización presidida por José Luis Escrivá.

En opinión de la AIReF, el 'café para todos' exige que las comunidades autónomas que arrastran mayores desviaciones sobre el objetivo de déficit en 2016 --0,7% del PIB-- tengan que hacer esfuerzos inalcanzables para su cumplimiento el próximo año y que las mejor posicionadas se relajen en el ajuste.

La consecuencia es que el grado de desviación final en el conjunto de estas administraciones es mayor que si hubiera objetivos diferentes para cada una, según la organización.

La mayoría de los consejeros de Hacienda autonómicos salieron entre críticas de la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) de este jueves, en la que finalmente se aprobó la propuesta de Montoro.

La delegación de Cataluña cuantificó que su objetivo de déficit debería ser del 1,21% del PIB en 2017, pero tendrá que ceñirse a ese 0,6%, la mitad. Es solo una muestra de las quejas vertidas contra esta decisión.

Sin embargo, miembros de AIReF presentes en la reunión tampoco presentaron los objetivos asimétricos que, en su opinión, deberían fijarse.

La razón es que, según fuentes de la organización, no pudieron finalizar el informe que deberían haber llevado a la reunión por falta de tiempo desde que se les informó de que el objetivo de déficit sería el mismo para todas las comunidades autónomas.

De hecho, los representantes del auditor se disponían tras la reunión a cerrar dicho informe. En conclusión, lo único que cabía decidir era la propuesta de Hacienda.

El mismo objetivo de déficit por "sentido práctico"

Preguntado por esta cuestión, Montoro ha justificado que el mismo objetivo de déficit para todas las comunidades autónomas responde a un "sentido práctico". Según dijo tras la reunión, los tiempos políticos exigían "velocidad" en la toma decisiones y no era posible establecer un "discusión" comunidad por comunidad. De haberlo hecho, dijo, "estaríamos en otro escenario".

El Gobierno solo ha establecido objetivos asimétricos de déficit público para las diferentes regiones en 2013, pero Montoro no quiso valorar aquella "primera experiencia". No obstante, abrió la puerta a que pueda repetirse cuando las comunidades retornen al equilibrio presupuestario en 2019.